Los perceberos incluidos dentro del Plan de Explotación del Cabo Peñas han logrado salvar la campaña navideña la última semana del año. Hasta entonces, temían no poder hacer caja en estas fechas tan señaladas por la baja calidad del producto debido a la sobreexplotación y la acción de los furtivos. Sin embargo, el buen tiempo que hubo entre Navidad y Nochevieja les permitió cavar con asiduidad y sacar rédito a su labor.
Abraham Mazuelas Rodríguez está satisfecho con la temporada de ventas durante la época navideña. "El buen tiempo nos dejó atacar el percebe cuando más valía", comentó. Y es que en esas fechas el crustáceo llegó a venderse a cerca de 90 euros el kilo en la rula de Avilés. Otro factor que influyó en la buena campaña navideña tuvo que ver con que el Principado les permite cavar durante 17 días en La Erbosa. "Allí había mejor material que en otras zonas", apuntó Francisco García Rodríguez, percebero de Luanco.
El precio de los percebes sacados del Cabo Peñas rondó los 90 euros el kilo. Sin embargo, en la rula de Puerto de Vega llegaron a vender crustáceos de otras zona de Asturias por una cantidad mayor. Y es que el valor del producto va lógicamente ligado a su calidad. "Nosotros trabajamos todo el año y no dejamos descansar a las piedras como hacen en otros sitios donde están dos años sin tocarlas y por eso las de zonas como Ortiguera son de mejor calidad y más grandes y así las pudieron vender en Puerto de Vega por más de 100 euros el kilo", explicó Mazuelas Rodríguez.
Por esta razón, los perceberos del Plan de Explotación del Cabo Peñas dejaron una zona de los acantilados sin tocar durante un año para lograr que se desarrollasen mejor las piezas en aras a sacar mayor rédito con su venta. Y es que el propósito de los perceberos que faenan en Gozón pasa por que el Principado reduzca las licencias con el objetivo de conseguir que siga habiendo crustáceos de buena calidad en el cabo más septentrional de Asturias los años venideros.
