La Autoridad Portuaria de Avilés ha trasladado la estación de medición de calidad del aire que tenía en el faro de San Juan al paseo de Conde de Gualdalhorce, junto a las instalaciones de la rula vieja. Es una zona con elevada circulación de tráfico pesado ya que en ella desemboca el tráfico que llega desde la arteria del Puerto en dirección a las empresas del entorno del polígono de Las Arobias .

"Esta ubicación se considera mucho más adecuada y representativa de la calidad del aire real que respiran los ciudadanos ya que se trata de una zona de tránsito habitual y mucho más próxima a núcleos poblados que en su anterior ubicación en el faro de San Juan, que está lejos de zonas pobladas. Allí las mediciones de la partículas en suspensión de PM10 registradas estaban fuertemente influenciadas por las brumas y aerosoles marinos", explicaron ayer desde el Puerto de Avilés. Esta medida forma parte del Plan de mejora de calidad del aire de la zona de Avilés.

El traslado ya se efectuó el pasado mes de diciembre, tras recibir el visto bueno por parte de la Dirección General de Prevención y Control Ambiental, y los datos que arroja se pueden consultar a través de la página web del Puerto y, próximamente, en la del Principado de Asturias. Su nueva denominación será estación Conde de Gualdalhorce. En enero, según las estadísticas ya recogidas, no se superó en ningún día la media de 50 microgramos por metro cúbico de partículas en suspensión, que es el máximo permitido por la ley. La media diaria rondó entre los 21 y los 40 microgramos por metro cúbico. Tampoco superó los máximos permitidos en otros contaminantes, como dióxido de nitrógeno o dióxido de azufre.

Los responsables de la Autoridad Portuaria explicaron que en el faro se instalarán dos nuevos sensores de dirección y velocidad del viento cuyos registros se podrán ver a través de la página web del Puerto. Esos sensores se integrarán en el cuadro de mando ambiental del Puerto de Avilés, que facilita información de la dirección e intensidad del viento a los usuarios registrados.

La red de control de calidad del aire del Puerto de Avilés cuenta con cuatro estaciones: Conde de Gualdalhorce, puerto deportivo, Raíces y Salinas. No están incluidas en la red oficial del Principado de Asturias, de la que sí depende la estación del Matadero, enclavada en el entorno portuario y una de las que peores cifras arroja de contaminación por partículas en Asturias. No obstante, en los últimos años, y con la realización de diferentes medidas medioambientales, se ha conseguido mitigar las elevadas cifras de polución. Los datos que maneja el Principado constatan que en 2018 disminuyeron un 40 por ciento los días en los que se superaron los límites máximos de partículas en suspensión (PM10). La zona sobrepasó los 50 microgramos por metro cúbico de ese contaminante en 70 jornadas por los 113 días de 2017. Eso sí, la estación aún está muy lejos de cumplir otro de los requisitos medioambientales, que es que las superaciones se produzcan menos de 35 ocasiones al año. Lo que sí mejoró en 2018 fue la media anual que no debe superarse: 40 microgramos por metro cúbico. Fue de 35 microgramos por metro cúbico. La Unión Europea acaba de permitir excluir esa estación de la red regional de calidad porque "no mide realmente la calidad del aire que respiran los avilesinos".