Alcoa ha mejorado la oferta que planteó ayer a los representantes de los trabajadores de Avilés y La Coruña. Las negociaciones prosiguen a contra reloj y, según ha podido saber este periódico, la compañía ofrece mejoras a las planteadas en el empleo y el plan social, según fuentes próximas a las conversaciones que se están desarrollando en Madrid.

Los representantes de los trabajadores avilesinos están planteando, entre otras cuestiones, que Alcoa provisione más dinero para el rearranque de las cubas en caso de la entrada de otro inversor.

La reunión de hoy partió con la última oferta que había hecho la empresa el día anterior. Alcoa planteó mantener la parada de las series de electrolisis, pero aceptaría proveer dinero para invertir en el rearranque de las cubas si se formaliza la entrada de un inversor antes del 30 de junio. En concreto, ofrece provisionar doce millones de euros para cada planta para volver a arrancar las cubas en caso de que haya inversor. Los sindicatos ven insuficiente esta suma. También propone no aplicar el ERTE (regulación de empleo temporal) durante ese periodo, personal al que abonaría el salario íntegro y las cotizaciones hasta el 30 de junio. En caso de no encontrar inversor, la empresa aplicaría su propuesta inicial: prejubilaciones, traslados e indemnizaciones de 45 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades, según las mismas fuentes.

Por ahora hay acercamiento de posturas pero se agota el tiempo. Ya se prevé que las conversaciones se alargarán hasta la madrugada. Si se alcanza un acuerdo, tendrá que ser refrendado por los trabajadores de las fábricas afectadas. De no haberlo, la multinacional tendrá quince días para comunicar su decisión definitva. Mañana hay convocada una asamblea a las 14.30 horas en la factoría de San Balandrán.

La tensión aumenta ante la sede del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE), donde están concentrados trabajadores de las factorías de Avilés y La Coruña. Se han producido incidentes entre algunos manifestantes y la Policía cuando los primeros intentaron cortar la calle al tráfico. Representantes de los comités de empresa salieron ante el revuelo, pero la negociación se ha retomado y se ha normalizado la situación en el exterior del edificio.