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Gozón

Los 600 "milagros" del Cristo del Socorro

Los colegiales de Luanco pintan sus particulares visiones de la galerna de 1776 en el concurso de dibujo de las fiestas

Nara Suárez, Telma Suárez y Claudia López, dibujando. JULIÁN RUS

"En mi dibujo se ve como una barca llega a una isla desierta gracias al Cristo de Socorro", explicó ayer Zaira Rodríguez Gutiérrez, del colegio La Vallina, en el parque Zapardel. El suyo fue uno de los alrededor de 600 dibujos que participan en el concurso infantil de las fiestas del Socorro, que llegó a su XLIX edición. Los pequeños de los colegios de La Vallina y La Canal, de la escuela infantil y de los CRA del concejo interpretaron a su manera el milagro del Cristo del Socorro durante la galerna de 1776. "Yo dibujé la marea, así con rayas porque esta revoltosa y el Cristo mirando a los barcos", señaló, por su parte Marco Gayo, de uno de los colegios rurales de Gozón.

"El milagro del Cristo del Socorro fue cuando salvó a los marineros porque la mar estaba muy mal y desde entonces se hace un desfile y una comida con un guiso de marisco", añadió Gayo junto sus compañeros Álex García y Diego Fernández. Los tres dibujaron ayer en el Museo Marítimo, donde los alumnos de 2.º de Primaria pudieron inspirarse viendo barcos y útiles marineros.

Para Llara Rodríguez, de La Vallina, el Cristo apareció crucificado en medio del mar para empujar los barcos, pero su amiga Lucía Gómez prefirió centrarse en los otros protagonistas de la historia, los pescadores: "Estaban pescando y había sol, pero llegaron las nubes". Iker Cueto, de La Canal, "vio" el milagro desde la iglesia de Luanco para inspirar su dibujo: "Yo he puesto a la gente esperando alrededor de la iglesia, con el Cristo, el puerto y la tormenta". En el agua de su obra está el "Nuevo Jaimar", el barco junto al que realizó su dibujo en el museo luanquín.

Los alumnos de 1.º de Primaria realizaron sus dibujos en el parque Zapardel, como Sara García, de La Vallina, que dibujó "la playa de Luanco y el sol que salió cuando el Cristo calmó el agua". Los más mayores se inspiraron en la zona de la torre del reloj y los más "peques" en la escuelina, pero todos quisieron dejar su visión de unas fiestas de las que ya son forofos. "Feliz Cristo del Socorro", se leía en muchos de los dibujos.

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