El Ayuntamiento tendrá que realizar una nueva obra en el velódromo municipal de San Cristóbal después de que unos ladrones sustrajeran la madrugada del pasado viernes 168 metros de cableado eléctrico de la iluminación de la pista. La Policía Local informó al gobierno local el día de autos y entonces mismo comenzó el trabajo para reponer el cableado.
Mientras se llevan a cabo las obras para solucionar la avería provocada por el robo, la iluminación de la pista de rodadura para bicicletas será parcial, ya que algunas de las luminarias del circuito todavía funcionan. Se espera que la iluminación quede totalmente restaurada antes de que finalice este mes.
El robo de cable es un problema que trae de cabeza a vecinos y empresarios. Hace apenas una semana, empresarios del PEPA denunciaron la sustracción de cable en dos puentes-grúa del polígono, antes sufrieron las molestias de los ladrones barrios como La Carriona, Villalegre o La Grandiella. El deporte tampoco es una faceta que los cacos respeten: el campo de Miramar, en Luanco, sufrió en su día una oleada de robos de cobre y ahora le ha tocado el turno al velódromo avilesino.
Para reponer el cable, el Ayuntamiento contratará toda una nueva línea de alimentación, una actuación que llega apenas medio año después de la reapertura de la instalación deportiva. Y es que el velódromo había sido remodelada en una obra que duró dos meses para subsanar las deficiencias que presentaba la pista de rodadura, con el asfaltado de los 400 metros de circuito.
