La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El policía que vela por los niños de África

Jorge Coronado es el único agente asturiano que participa en un proyecto para donar material escolar a niños de Burkina Faso, Mauritania y Mali

Jorge Coronado, ayer, en el barrio de Sabugo.

"No es lo mismo ver el tercer mundo por la televisión que vivirlo. Siento que conocerlo ha sido un regalo". Habla el Policía Nacional de Avilés Jorge Coronado, padre de familia numerosa e impulsor en Asturias de un proyecto solidario que nutre de material escolar a niños de Burkina Faso, Mauritania y Mali. Fue un destino laboral en Guinea Konacri lo que hizo cambiar el chip a este agente natural de Piedras Blancas (Castrillón). Allí convivió con aquellos que no tienen más que para sobrevivir y conoció a Pepe Cruz, el policía malagueño que fundó en 2015 junto a otros miembros de cuerpos y fuerzas de seguridad "Policía Amigo". La asociación, de la que ya forman parte profesionales de diferentes ámbitos, tiene como finalidad la acción humanitaria y la solidaridad con aquellas personas, familias o colectivos más necesitados, con especial atención a la infancia. Cruz y Coronado ofrecerán mañana su primera charla en un centro asturiano. Será en el Colegio Poeta Juan Ochoa de La Luz.

El castrillonense pasó dos años trabajando en seguridad en la Embajada de Guinea Konacri, uno de los países asolados por la epidemia de ébola de 2014. Regresó a casa el pasado octubre después de vivir una experiencia que ya le ha marcado de por vida. "Allí todo el mundo es pobre, no hay clases. Mi mayor temor era encontrarme con niños desnutridos. No he visto a gente pasar hambre, pero sí vivir con nada: sin condiciones higinénicas, vistiendo la misma ropa... Son felices y lo mínimo que tienen te lo dan. Si nosotros fuésemos tan solidarios como ellos, el mundo sería distinto", sostiene.

En Konakri el Atlántico "es marrón" ("Tiran todo al mar") y un neumático es para los niños guineanos más valioso que una Play Stataion para los pequeños españoles. "Aquí tienen de todo. Y se aburren", lamenta el agente del Cuerpo Nacional de Policía. Él tiene tres hijos, un niño de diez años y dos gemelas de siete a los que alecciona con su experiencia. Y abora quiere ser la voz de esos pequeños africanos por los centros educativos.

Mañana comienza su misión en el colegio público del barrio de La Luz. Uno de los objetivos es conseguir que "Policía Amigo" logre recabar 5.000 mochilas con material escolar (lo básico: libretas, lápices, bolígrafos, gomas de borrar...) para los niños más necesitados del continente negro. No hay intertemediarios. Los propios voluntarios las llevan en mano.

Le acompañará el fundador de "Policía Amigo", al que conoció en Konakri. "Pepe estaba en su segunda expedición en Burkina Faso y cuando regresaba a España tuvo un accidente. Lo derivaron a Konakri y fui con otro compañero a verlo al hospital por si necesitaba algo. Así conocí su labor, entramos en contacto y hsta hoy", cuenta Coronado.

El castrillonense está entusiasmado con el proyecto solidario: "Con una simple mochila puedes cambiar la vida de un niño. Es una historia maravillosa". Quiere habilitar varios puntos de donación en la comarca, todavía por definir, y confía en que sean muchas las personas que se animen a colaborar con "Policía Amigo" como voluntarios. Su tiempo, reconoce, es muy limitado.

Volverá a África, cuando sus hijos "crezcan un poco". "Quiero que conozcan aquella realidad", concluye el "Policía Amigo" asturiano.

Compartir el artículo

stats