La teoría de la probabilidad se puso en práctica la pasada madrugada en Avilés: la Policía Local detuvo en sendos controles con unas dos horas de diferencia al mismo conductor, que circulaba bajo los efectos de bebidas alcohólicas. En ambos casos dio menos de 0,6 miligramos por litro de aire espirado, por lo que las dos diligencias que se le abrieron fueron por vía administrativa. La imprudencia no obstante le valió al conductor 1.000 euros y ocho puntos en total: 500 euros y cuatro puntos por infracción, según los agentes de la Policía Local.

Los agentes también detuvieron ayer a las siete y media de la tarde a un joven de 20 años por circular sin carné de conducir. En este caso los policías actuaron tras un "chivatazo": los agentes recibieron la llamada de un persona alertándoles de que un joven se iba a subir a un coche sin el pertinente permiso de conducir.

Los agentes que patrullan por los barrios iniciaron entonces la búsqueda y dieron con el piloto en la calle Avilés, en las inmediaciones de la glorieta provisional de La Rocica. Al pedirle la documentación confirmaron que carecía de la misma. El detenido responde a las iniciales A. H. V.