El párroco de Sabugo, Reinerio Rodríguez, "Neyo", anunció ayer, al término de la misa del peregrino, que solicitará al Arzobispo de Oviedo una reliquia del beato César Gonzalo Zurro Fanjul, mártir seminarista y víctima de la Revolución del 34. "Si tiene a bien concedernos esta petición, sus vecinos de Sabugo podremos venerarle cada 9 de marzo", explicó.

Y es que César Gonzalo Zurro Fanjul es oriundo de Sabugo (Avilés) donde nació en 1912. Era hijo de Luis Zurro Fernández, de Valladolid, y de Mercedes Fanjul Ania, de Lugo de Llanera.

La familia pronto se trasladó a Figaredo, en Mieres. Allí el padre del nuevo beato comenzó a trabajar como minero. Ingresó a los 9 años en el Seminario de Villacarriedo, (Santander). Llegó al seminario de Valdediós al comienzo del curso 1923-1924. Su vida terminó a tiros en Oviedo. Hace pocas fechas él y otros compañeros fueron beatificados.

La petición de una reliquia fue el preludio de la ceremonia de imposición de la medalla "Víctimas del Terrorismo" a la Real Cofradía de Nuestra de la Virgen de la Soledad por parte de la Asociación Histórica Guardia Civil. La Real Liga Naval promovió el reconocimiento a la hermandad avilesina a través de su presidente, el cofrade Antonio Sabino. Los miembros de la Asociación quisieron reconocer "el apoyo incondicional a las víctimas y sus familias". La cofradía agradeció la imposición de la medalla: "Lo agradecemos de corazón".

El párroco tomó la palabra después de la ceremonia dirigiéndose directamente al capitán Mariano Revuelta, que recientemente fue nombrado cofrade de honor. "En España las fuerzas de seguridad el Estado estáis al pie del cañón. Estáis pendientes de nosotros. Y eso debe ser reconocido", destacó Rodríguez que también dio las gracias a los cofrades que decidieron "dar lo puesto en el sorteo de Navidad a la Virgen". Explicó que gracias a esto la cofradía cuenta con un nuevo estandarte. Tras ello, procedió a su bendición.