"Más que personas hay entornos discapacitados". Esa fue una de las reflexiones que Domingo Martínez, expresidente y fundador de Difac (Asociación de discapacitados físicos de Avilés y comarca), lanzó durante la primera sesión del ciclo "Discapacidad y vejez", organizado por la Asociación Cultural "La Serrana". Martínez instó a la clase política a desarrollar planes inclusivos de ciudad y defendió que cada persona "tiene la capacidad que tiene" y criticó que, en muchas ocasiones, "las limitaciones las provocan las barreras del entorno". "La accesibilidad es imprescindible para la autonomía personal, es una necesidad y es un derecho", enfatizó el miembro de Difac, que defendió "entradas únicas" a edificios en vez de habilitar rampas y escaleras "porque eso es inclusión", lo otro es "integración". También tuvo tiempo para destacar que los políticos y los técnicos "tienen el deber profesional y humano" de acondicionar las ciudades y que sean accesibles para toda la ciudadanía. "Hablamos de discapacidad y de vejez, de personas con derechos, sentimientos y vivencias que también son emocionales", remató Martínez.

Le cogió el testigo la psicóloga y colaboradora de LA NUEVA ESPAÑA Marisol Delgado, que se centró más en las barreras sociales. "Hay ocasiones que los ladrillos no están las escaleras sino en las cabezas", espetó nada más comenzar su conferencia. Delgado defendió que hay que huir de la sobrepotección a mayores y personas con diversidad funcional. "Nadie quiere que le traten como un inútil, las personas quieren que les preste ayuda, pero sea útil", defendió la psicóloga, que habló de la necesidad de escuchar y de ser empáticos.

El ciclo de conferencias "Vejez y discapacidad" continúa hoy por la mañana. Hablará a las 10.30 horas el abogado Ramón Triguero y, a las 12.15, el letrado Manuel Rubio, el urbanista Luis de Vicente y el economista Jesús Sanmartín.