El administrador de comunidades de vecinos procesado ya en varias ocasiones por delitos de apropiación indebida -ahora está en prisión tras ser condenado a cerca de veinte años de cárcel por la suma de sus acciones - reconoció ayer en Gijón un nuevo delito por el que aceptó otros dos años de cárcel, tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular.

Marcos D. A., vecino de Luanco, llegó ayer a la sala de vistas de las sección octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, procedente del Centro Penitenciario de Asturias, esposado y custodiado por la Policía Nacional. Ante el tribunal, presidido por la magistrada Alicia Martínez Serrano, se limitó a responder que su estado civil sigue siendo casado y que su profesión fue primero abogado y después consultor. En el desempeño de ambas labores, precisamente, es donde cometió los delitos de apropiación indebida que le tienen preso.

Ayer, tras mostrar su conformidad, sumó otros dos años de cárcel y el pago de 41.461,32 euros con los que deberá indemnizar a la comunidad de propietarios -representados en este procedimiento por el letrado Francisco Javier Suárez García- de un inmueble ubicado en la calle Isla Erbosa de Luanco. En ella, trabajó durante cinco años en los que aprovechó para quedarse con el dinero que administraba.