La dueña de los bulldogs franceses que atacaron a una niña de dos años en el barrio de Jardín de Cantos no cometió delito alguno. Así lo determina el juez de lo penal Número 2 de Avilés que dictó sentencia esta misma semana, una sentencia, en todo caso, que la acusada recibe "con satisfacción".

La sentencia también señala que la propietaria de los animales reparó el daño causado por ellos cuando salieron de la casa, empujaron a la niña y terminaron mordiéndola.

Los hechos habían sucedido cuando la dueña de los perros abrió la puerta de su casa porque la madre de la niña había llamado para entregarle unas llaves que la dueña de los perros precisaba. La mujer abrió sin mirar por la mirilla y los perros salieron contra la menor. Hubo entonces gritos. El hijo de la dueña guardó a los perros, la dueña de los animales cogió a la niña en brazos y, después, llegó la Policía.