El conocimiento ayer, gracias a la información publicada en este diario, de la supuesta concesión irregular de una gratificación salarial de 300 euros mensuales a la secretaria de la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, ha generado una reacción en cadena de todos los grupos políticos de la oposición, hartos según manifiestan de los "manejos" del PSOE en el área de Recursos Humanos. La crítica de los partidos se suma a la de los sindicatos municipales, que han anunciado paros para después de Semana Santa quejosos por los incumplimientos del gobierno avilesino. El sentir general de la oposición es que "llueve sobre mojado" y que la nueva sospecha de que el PSOE usa dinero público para gratificar a una persona afín -esto tendrá que decidirlo el juez que presidirá mañana la vista convocada al efecto- es "la gota que colma el vaso".
Todos los partidos con representación municipal excusaron su ignorancia de la polémica gratificación que ha revelado el sindicato USIPA apelando a la "opacidad" con la que el PSOE "envuelve sus manejos" en el área de Personal y el hecho -especialmente criticado por Ganemos- de que la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) no sea pública. Dado el desconocimiento del caso y en vísperas del juicio, todos los partidos prefirieron ser cautelosos en sus declaraciones sobre el plus salarial concedido a la secretaria de alcaldía. Dicho lo cual, cargaron a saco contra el conjunto de la política de personal de los socialistas avilesinos.
"No es de recibo y dice muy poco en favor del equipo de gobierno que la política de personal sea dictada en los juzgados, a donde los sindicatos municipales tienen que acudir cada dos por tres para poner los puntos sobre las íes a la gestión del PSOE", manifestó la edil del PP Ana Bretón, quien remachó "y menos mal que presume de ser un partido de izquierdas; o sea, presuntamente 'sensible' a las demandas de los trabajadores".
El concejal de Somos Primitivo Abella enmarca el caso del plus salarial que se juzgará mañana en "la política clientelar, arbitraria y basada en la teoría del palo y la zanahoria que practica el PSOE avilesino desde tiempo inmemoriales con resultados nefastos". Abella simpatiza con el "lógico malestar" del grueso de la plantilla municipal, "la consecuencia de fiarlo todo al tira que libras".
"Este nuevo caso que sale a la luz por la iniciativa de USIPA, y otros anteriores, no son casualidad; tampoco lo son el 40 por ciento de temporalidad de la plantilla municipal ni la negativa de la Alcaldesa a recibir a los representantes municipales, que quieren expresarle su malestar por incumplimientos reiterados de acuerdos tomados en su día. Todo responde a una estrategia negligente del PSOE cuyo resultado no es que hayan podrido dos ranas sino que está infectada toda la charca", criticó la portavoz municipal de IU, Llarina González.
Por Ciudadanos habló la edil Carmen Pérez Soberón para decir que le llama la atención el hecho de que "pese a la manifiesta degradación del área de Personal, el concejal responsable (Raúl Marquínez) repite en la candidatura del PSOE" y reseñar que, en su opinión, "la judicialización de todo lo relacionado con Recursos Humanos denota el fracaso de la capacidad de interlocución del PSOE".
Agustín Sánchez, de Ganemos, invocó la necesidad de "trabajar con más transparencia" en el área de Personal, así como con planificación a medio y largo plazo, "todo lo contrario que hasta ahora, cuando ha venido primando la improvisación".
