El comité de empresa de Alcoa en Avilés acusó ayer que la dirección de la multinacional de no haber apostado por el plan de los traslados a San Ciprián (el personal mayor de 57 años podía pedir la baja incentivada para dejar su plaza a trabajadores de las fábricas de Avilés y La Coruña, ahora en proceso de cierre).
La empresa había asegurado que había 100 personas que potencialmente podrían elegir marchar. Finalmente han sido 37. "Buena parte de ellas, encima, son jefes", se lamentó José Manuel Gómez de la Uz, el presidente del comité de San Balandrán. "Así que habrá más despidos de los que nos habían advertido", añadió.
Aseguran desde el comité de empresa que se les había trasladado siempre "que era un acuerdo tan bueno que los trabajadores de San Ciprián se acogerían al plan social en vez de esperar a su prejubilación". Añadieron: "La gestión de Alcoa conlleva que apenas haya recolocaciones".
