Las ayudas a la industria de compensación de costes indirectos de CO2 ascenderá hasta los 200 millones, anunció ayer el Gobierno. Una medida que da aire a la plantilla de Alcoa, que confía en que "este compromiso con la industria electrointensiva" contribuirá a la venta de las plantas de Avilés y La Coruña. Esta solicitud de incrementar las ayudas la trasladó formalmente el Gobierno del Principado a Madrid el pasado febrero, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA. Ayer, en pleno cierre de campaña electoral para las generales y tras el frenazo al Estatuto del consumidor electrointensivo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez acabó aceptando una demanda que también provenía de los sindicatos y de la patronal.

El viernes del último Consejo de Ministros antes de los comicios arrancó con la familia aluminera hundida por el batacazo del freno al prometido Estatuto del consumidor electrointensivo y se despidió con una bocanada de aire en el tiempo de descuento. En una larga reunión entre el presidente autonómico Javier Fernández y los sindicatos, en la que también participó el Consejero de Industria, Isaac Pola, se acordó reclamar a Madrid el aumento de la partida de la compensación por CO2 hasta el tope que permite Bruselas para mitigar las consecuencias del retraso en el Estatuto en el proceso de venta de Alcoa. Esta medida la puede ejecutar un Gobierno en funciones, incidieron.

A última hora de la tarde, y en un viaje exprés a Asturias que según las fuentes consultadas se gestó ya avanzado el mediodía, el secretario general de Industria, Raúl Blanco, confirmó al comité de la fábrica de San Balandrán el incremento de la partida para ayudas por CO2 de 91 a 200 millones de euros. "Es el máximo que nos permite la Comisión Europea, en las próximas semanas se ejecutará. En paralelo se seguirán los trabajos del Estatuto del consumidor electrointensivo para llegar a un pronta aprobación y contribuir no solo a acompañar la inversión que tiene que realizar al potencial inversor en las plantas de Alcoa, sino también al conjunto de la industria electrointensiva que tan importante es para Asturias", señaló.

El anuncio ya había trascendido un par de horas antes, en la reunión que mantuvo el comité de empresa de Alcoa en la sede de la Federación Socialista Asturiana (FSA) con la candidata al Congreso por Asturias, Adriana Lastra; el número uno al Principado, Adrián Barbón, y los regidores de Avilés y Gozón, Mariví Monteserín y Jorge Suárez. Mientras en la calle la familia aluminera gritaba "¡Sánchez, Barbón, Alcoa solución!" en una manifestación convocada pocas horas antes, y tras llamadas telefónicas entre Oviedo y Madrid, Lastra soltó el bombazo a los trabajadores que le reclamaban más dinero en ayudas por emisiones. "Por responsabilidad, no hemos llevado el estatuto hoy (por ayer). Pero va a haberlo. El Ministerio de Industria seguirá trabajando para hacer un buen estatuto que responda a las necesidades del sector", apuntó.

"Esto sí es un compromiso por parte del Gobierno con la industria y un mensaje a los inversores para Alcoa de que se está trabajando por un marco energético a largo plazo. Protestamos cuando las cosas se hacen mal y las reconocemos cuando se hacen bien. El aumento de esta partida supone económicamente 109 millones más de los que había previstos", aseveró el presidente del comité de empresa de Alcoa, José Manuel Gómez de la Uz. La plantilla, que espera dejar suscrito por escrito ese compromiso en la próxima reunión de la mesa de seguimiento de la venta de Alcoa (6 de mayo) advierte no obstante de que "queda mucho trabajo por hacer para conseguir un inversor que mantenga el empleo y que sea solvente" antes del 30 de junio.