El Hospital Universitario San Agustín (HUSA) está a punto de dar un salto de calidad que redundará en un mejor servicio a los enfermos que necesiten hacerse una resonancia magnética y facilitará a los especialistas la labor de diagnóstico, muy especialmente en las dolencias relacionadas con el cáncer, y los sistemas neurológico y cardiaco. El nuevo impulso hospitalario viene dado por la compra e inminente instalación de un nuevo aparato de última generación para la obtención de imágenes por resonancia magnética nuclear (IRMN), un moderno tomógrafo que sustituirá al que viene prestando servicio desde hace doce años. La nueva máquina, de 1,5 teslas, aportará mayor calidad de imagen, permitirá agilizará los estudios y aumentará el confort de los usuarios. La inversión en este equipamiento tecnológico que incrementará las prestaciones del hospital de referencia del área sanitaria III asciende a 599.918 euros, según ha comunicado el Gobierno del Principado.

La transformación tecnológica incluye la adquisición de software, hardware, sistema de comunicación, mesa de exploración y consola de trabajo, además de la remodelación de la actual sala de resonancia magnética del servicio de Radiodiagnóstico. El personal encargado de manejar este equipo recibirá formación adecuada para sacarle el mayor rendimiento.

El Hospital Universitario San Agustín de Avilés abordará a partir de la próxima semana la renovación del equipo de resonancia magnética, que incorporará la última tecnología digital, entre otras mejoras. La gerencia del área sanitaria estima que la nueva plataforma entrará en servicio el 8 de octubre y que la actividad del servicio de radiodiagnóstico recuperará su ritmo habitual, con una media de entre 20 y 24 pacientes diarios (6.333 pruebas realizadas en total el año pasado), a partir del 14 de octubre.

Para evitar un impacto negativo en las listas de espera, la gerencia hospitalaria ha diseñado un plan que tiene por objetivo minimizar el impacto que tendrá la suspensión de la realización de resonancias magnéticas durante el tiempo que duren los trabajos de desmontaje de la antigua máquina y de colocación y puesta en funcionamiento de la nueva.

Como primera medida, 400 estudios de resonancia magnética que estaban programados para las próximas semanas ya se han derivado a otros centros sanitarios concertados. Asimismo, durante el tiempo de parada del tomógrafo, los estudios de pacientes hospitalizados o que hayan entrado por urgencias, así como las pruebas ambulatorias preferentes, también se derivarán a otros centros. Esto requerirá, a su vez, un refuerzo del servicio de ambulancias para realizar los traslados de los enfermos.

La resonancia magnética nuclear es una técnica de exploración del cuerpo no invasiva. Los equipos de IRMN son máquinas con muchos componentes que se integran con gran precisión para obtener información sobre la distribución de los átomos en el cuerpo humano . El elemento principal del equipo es un imán capaz de generar un campo magnético constante de gran intensidad. La información obtenida al introducir un cuerpo o parte del mismo dentro del "tubo" del aparato de radiodiagnosis es procesada por ordenadores y transformada en imágenes del interior de lo que se ha analizado.