"Omar L. M. no ocultó su epilepsia". Así lo ha asegurado esta mañana ante el juez uno de los neurólogos del HUCA (Hospital Universitario Central de Asturias) que trató al chófer que conducía el autobús que se estampó contra un pilar a la salida de Avilés por la "Y" el 3 de septiembre de 2018, según el abogado de la defensa, Víctor Tartiere. Esta versión contrasta con la dada el pasado mes de julio por un médico reconocedor de la empresa Cualtis, que afirmó en los juzgados avilesinos que el chófer no había revelado su dolencia neurológica en el reconocimiento médico. Según el letrado de Omar L. M., la versión dada hoy por el facultativo "no tiene gran relevancia para el caso". Sí esperan que tenga más trascendencia la declaración de la doctora que le dio el alta médica, que pasará por sede judicial el próximo octubre. Asimismo, el letrado también ha afirmado que solicitó una nueva declaración del conductor, tal y como ya adelantó LA NUEVA ESPAÑA el pasado 3 de septiembre, cuando se cumplía el primer aniversario del fatal suceso, en el que fallecieron cinco pasajeros y otros quince resultaron heridos.

Omar L. M. declaró el pasado 25 de abril. Aunque su testimonio era uno de los más esperados, parece que poco podrá ayudar a esclarecer el suceso. Según afirmó en sede judicial su abogado, el chófer aseguró que "no se dio cuenta de lo que pasó, no puede precisar cómo fue el accidente, ni puede dar ningún detalle del mismo". Ahora habrá que esperar a que el juez decida si acepta o no una segunda declaración del chófer.

Una de las principales hipótesis que se barajan para tratar de explica el accidente es que el chófer sufriese un vahído instantes antes del impacto. Si bien, este punto no ha podido confirmarse por el momento.