Illán GARCÍA
Los alumnos del colegio Virgen de las Mareas, en el Nodo, viven momentos de incertidumbre. Saben que este año podrán seguir estudiando en el centro público del barrio de pescadores, sin embargo, aún no conocen el colegio en el que seguirán aprendiendo el próximo curso. Sus familias están preocupadas aunque predispuestas a que el centro comparta espacio con la Escuela del Deporte, que se trasladará a él una vez comience el período lectivo 2020-2021, según ha fijado la Consejería de Educación.
Desirée Jiménez y Rocío Hernández son dos madres de alumnos que están a pocos trámites de formar la AMPA del centro. No quieren que el alumnado del Virgen de las Mareas se vaya del colegio el próximo año y, en el peor de los casos, no quieren que los vínculos que mantienen los pequeños entre sí se pierdan si les trasladan a centros diferentes. "Este año contamos con profesores nuevos, habrá actividades extraescolares y no consentiremos que tengamos que dividir a los niños en cinco centros", apuntan ambas. Jiménez y Hernández confían en que la Consejería de Educación o el Ayuntamiento den pronto una salida a esta situación.
"¿Si los críos tienen que ir a otro colegio, habrá autobús? Hay familias que no tienen coche para poder llevar a los niños", se preguntan las madres, que apuntan además que la pérdida del centro de Infantil y Primaria en el Nodo "afectará al barrio". "Queremos que se comparta la Escuela del Deporte con el colegio, no creemos que haya problemas. Si cierra, será con nosotras dentro", señalaron.
El director del colegio Virgen de las Mareas, José Ramón Núñez, afronta el nuevo curso con "normalidad". "El proyecto de centro continúa y mi papel es tranquilizar a las familias, nos implicaremos en desarrollar programas de participación", apunta el máximo responsable del centro educativo.
El plan de Núñez y su equipo pasa por incorporar actividades extraescolares que antes no se desarrollaban, impulsar iniciativas sobre la cultura y el arte, la música y el baile y apostar por la coordinación de actividades con otros centros. "Los alumnos de quinto y sexto formarán una cooperativa, nos adherimos al programa Pamua y seguiremos desarrollando planes de innovación y participación del alumnado y de toda la comunidad educativa además de colaborar con distintas ONG", dice el director del Virgen de las Mareas, un centro en la encrucijada.
