"Juego mucho entre la sátira y la ironía", relata David Pérez sobre su novela de fantasía "La nada trascendente", que fue protagonista en el Club de LA NUEVA ESPAÑA de Avilés. El joven autor (Boal, 1984) plasma en su primera obra las inquietudes con las que ha vivido. "Este libro es el fruto de un proceso de reflexión personal, de idas y venidas, en el que he tratado de forma un argumento coherente", indica.

Se trata de un viaje por diversos lugares, entre los que se encuentra escondido su Boal natal, en el que "la nada trascendente es un estado mental, la forma de ver la vida con una sensación de abismo y de desencanto en el que creo que nuestra generación nos mostramos indolentes porque es el camino que nos marcó la vida".

La vocación de David Pérez no era otra que la de escribir y lo logró con su primera novela, que califica como una especie "de juego". También entra en acción durante la lectura una segunda parte, con mensajes dirigidos incluso hacia el autor desde un futuro. De esta forma lo recuerda en su interior. El joven escritor, que se considera "realista, aunque no termino de creerme la realidad", detalla que bajo su juicio el mejor capítulo "es el último", en el que toda la novela acaba teniendo un sentido. Antes de resolver el desenlace "un fantasma recorre Europa", como señala desde un inicio su sinopsis.