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Periodista, presentó ayer en la Casa de Cultura su documental "Hotel Explotación: las kellys"

Georgina Cisquella: "No encontré a ninguna kelly que no lleve pastillas por su salud"

"Las camareras de pisos reclaman soluciones a sus sueldos precarios y que se acabe con las externalizaciones en los hoteles"

Georgina Cisquella. RICARDO SOLÍS

Georgina Cisquella (Barcelona, 1954) es una periodista que fue directora de La 2 Noticias, entre otros puestos en Televisión Española, hasta que en 2009 fue despedida con un ERE. Es además documentalista y ayer presentó en la Casa de Cultura su última obra, el documental "Hotel Explotación: las kellys", con el que ganó el premio al mejor largometraje iberoamericano en el Festival de Cine Migrante de Buenos Aires.

- ¿Por qué decidió hacer un documental sobre las kellys?

-Me interesa el tema de la precariedad laboral y además de la precariedad laboral femenina. Me llamó la atención que las que limpian en los hoteles salían en pequeñas noticias en los periódicos y decidí contactar con ellas. Son mujeres que trabajan con sobrecarga, sueldos precarios y tienen que ir a su casa concliliar la vida familiar. Y aun así tienen la energía de juntarse, de asociarse y de empezar a hacerse visibles. ¿Quién conocía a las kellys? Yo no sabía que existía una categoría laboral que se llamara camareras de pisos.

- Todo ello teniendo en cuenta que uno de los principales motores económicos del país es el turismo

-Eso es. Me parecía una gran contradición que este país alardee de la industria turística como buque insignia de la economía y, en cambio, miles de mujeres que lo sostienen tengan muchas cargas de trabajo, estén externalizadas,...

- ¿Qué implica la externalización de los servicios de las kellys en los hoteles?

-Muchos hoteleros despidiron a sus plantillas y en ocasiones volvieron a contratar a las mismas trabajadores que ahora pertenecen a otras empresas externas. Esas empresas se llevan una parte del sueldo. A ellas se les rebaja el sueldo porque ya no dependen de la plantilla del hotel y pierden sus derechos. El comité de emnpresa del hotel no las puede asumir porque dependen de la empresa externalizada.

- ¿Hay diferencias entre las camareras de pisos y las de alojamientos turísticos?

-Incluso dentro de los hoteles hay muchas diferencias. No podemos decir que el cien por ciento de los hoteles haga esto. Hay hoteleros que son conscientes de la importancia de este trabajo. No es lo mismo un hotel de cinco estrellas que en una pensión, que lo que ocurre en los pisos. Hay diferencias salariales, depende de las zonas turísticas... Tienen además muchos problemas de salud, creo que no encontré a ninguna que no lleve pastillas en el bolso. Si no es por tendinitis, hernias discales, es por otra cosa, para trabajar necesitan medicarse y cuando una chica empieza con veinte años no pasa apenas nada, pero cuando tienes cincuenta y llevas treinta años...

- ¿Existe un perfil tipo de las kellys?

-Muchas son migrantes y muchas necesitan el trabajo de hoy para mañana; las hay monoparentales, separadas con hijos... Muchas tienen que aceptar el contrato que les dan.

- ¿Qué se puede hacer para regularizar esta situación?

-Ellas hablan de la "Ley Kelly" para acabar con la externalización y que formen parte de la plantilla de los hoteles. Una cosa es que un día un hotel necesite contratar a alguien por un evento concreto, pero esto es otra cosa. La base estructural del hotel son ellas. Piden que se controle la sobrecarga de trabajo y que haya inspecciones para analizar las horas, hacen un contrato por cinco y trabajan ocho. Hasta que no acaban de limpiar las habitaciones adjudicadas... Con el control horario firmas cuando entras y cuando sales, pero ahora vete a limpiar otra vez, les dicen.

- ¿Y sin firmar?

-Claro. Hace poco que estaba en Benidorm y me enseñaron un anuncio en el que ponía buscamos camarera de pisos por ocho horas y le damos de alta de cinco, ya directamente. Trabajando fines de semana con un día libre y por setecientos al mes. Hay camareras que forman parte de plantillas de los hoteles pero muchísimas no.

- La voz de las kellys se sintió en el Parlamento Europeo. ¿De qué sirvió?

-Para darles visibilidad. En el Parlamento europeo, en principio, demandaron una inspección de la sobrecarga y de las enfermedades laborales. Aceptaron la reclamación pero dijeron lo vamos a estudiar y tiempo después indicaron que era un tema del gobierno español. No es un problema solo de aquí, es europeo. Es un trabajo importantísimo. Si una habitación de un hotel esta sucia, no vuelves. Las necesitan sí o sí.

- ¿Hubo represalias?

-Alguna sí. Como castigo, a una la pusieron en las habitaciones de super lujo: a limpiar más mamparas, más jacuzzi. Una de Lanzarote fue despedida y hubo otro intento, pero la cadena decidió no hacer nada.

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