Cincuenta metros marcha atrás sin conductor a bordo. Esa fue la distancia que recorrió un coche que había sido estacionado en doble fila en la calle Españolito y que en un momento dado, probablemente por haber realizado mal la maniobra de inmovilización, se puso en movimiento y acabó frenado contra un banco.

El insólito suceso se produjo sobre las dos de esta tarde en la calle Españolito, próxima a Las Meanas. El vehículo descontrolado recorrió en sentido contrario al de la marcha la vía en la que su conductor lo había detenido, atravesó el cruce de ésta con la calle del Prado (afortunadamente sin encontrarse en ese momento con otros usuarios de la calzada), saltó a una acera, entró en una zona verde y acabó la carrera desenfrenada al estamparse contra una banco de hormigón existente en la plazuela existente entre las calles del Prado y José Cueto.

No hubo que lamentar daños personales y los materiales no parecían cuantiosos. La Policía Local de Avilés, cuyo cuartel se halla a escasa distancia del lugar donde se produjo el suceso, fue avisada de lo ocurrido y los agentes acabaron por localizar al dueño del coche, que dio parte a la grúa de su seguro para rescatar el vehículo del lugar donde, finalmente, quedó parado.