"Si la invención de la máquina de vapor en el siglo XVIII sirvió para que el hombre pudiera transcender su fuerza, ahora la inteligencia artificial valdrá para que el ser humano pueda transcender su capacidad cognitiva". Esta reflexión pertenece a Rubén Hidalgo, ingeniero químico gijonés de Capsa especializado en gestión empresarial e innovación, que hoy a las 19.30 horas ofrecerá una charla sobre inteligencia artificial organizada por la asociación La Serrana.
"La conferencia tiene un enfoque positivo. Nadie puede pensar ahora que la máquina de vapor nos perjudicó. La inteligencia artificial ampliará nuestras capacidades por encima de nuestra naturaleza", asegura Hidalgo. "Estamos en una época de cambios y el cambio genera miedo y frustración", cuenta el ingeniero.
Rubén Hidalgo se centrará en el concepto de las cadenas de valor; es decir, en todos los pasos que se siguen a la hora de fabricar un producto. Antaño, según el experto, el valor estaba en la producción. "Ahora ya no es así. Los mejores salarios y la mejor optimización de la riqueza está en el I+D, en la logística de ventas, en los análisis de mercado, mientras que hacer un producto en sí está peor pagado", reflexiona.
Hidalgo pone de ejemplo un teléfono inteligente para explicar lo que dice. "El marketing de ese teléfono atrapa mucho más valor que ensamblar las piezas de un móvil. Esto tiene dos noticias, una buena y otra mala", anuncia el experto. "La mala es que todas las tareas robustas serán automatizadas. Las harán robots. La buena, que otras habilidades como el pensamiento crítico se están reforzando", dice.
Este paisaje dibuja un problema. ¿Qué sucederá con la gente mayor que lleva tiempo realizando la misma cosa? Hidalgo apuesta por su capacidad para reciclarse y pone un nuevo ejemplo. "Los ordenadores en los ochenta eran complejos de usar. Hoy, la interfaz se ha vuelto muy sencilla. Todo dependerá de la capacidad de adaptación. Habrá que obligarse un poco a ello", anuncia.
Y eso será porque según la tesis de Hidalgo no es que se estén produciendo muchos cambios, más que en el pasado. Sino que ahora estas variaciones se hacen a una velocidad mucho mayor. "Hay que desaprender cómo hacemos las cosas y aprender a hacerlas de manera diferente. Pasamos mucho tiempo diciendo que no", indica.
Rubén Hidalgo cita varios ejemplos en los que la tecnología artificial ya está instaurada en la vida cotidiana. "Cada vez que entras en internet hay una inteligencia artificial que aprende de ti", asegura. "Esa información se almacena para que se pueda aprender y los consumidores tengan mejores servicios", explica
En esta línea, Hidalgo habla de Yuval Noah Harari, un conocido divulgador científico, que reflexiona sobre esta nueva doctrina, llamada dataísmo. "Todos queremos que cuando vayamos a comprar el pan sepan qué tipo de barra nos gusta. Ahora bien, hay un tema moral y es la falta de privacidad. Si saben lo que te gusta, te pueden manipular. ¿Dónde está el equilibrio", se cuestiona.
Por último, Hidalgo añade que "la inteligencia artificial es para cualquier industria y de cualquier tamaño". Una idea que desarrollará hoy en la charla que ofrecerá en la Asociación Cultural La Serrana a las 19.30 horas en el hotel 40 Nudos.
