Los vecinos de Trasona, en Corvera, ven cada vez más cerca la solución a su enquistado problema de la contaminación acústica que genera la autopista "Y" desde su construcción hace 43 años. La Delegación del Gobierno adjudicó ayer a Noega Ingenieros la redacción del proyecto para colocar pantallas acústicas, con un plazo de tres meses. La petición por parte de los vecinos y el gobierno corverano es que se instalen unas barreras antisonido a ambos lados de la calzada, así como la modificación del firme de la autopista para que disminuya de forma considerable el molesto ruido que afecta a los residentes desde hace décadas.
La demanda llevada a cabo por el Ayuntamiento de Corvera ante el Ministerio de Fomento hace varios años ha dado por fin un paso de gigante al frente para llegar a buen puerto. "Se va avanzando, éste es un paso más en la lucha por lograr el objetivo que todos compartimos desde hace mucho tiempo, se ve la luz al final del túnel después de cuarenta años", relató ayer el alcalde, Iván Fernández (PSOE), al ser informado por la Delegación de Gobierno de la adjudicación. Una vez conocida la noticia, el gobierno local lo puso en conocimiento de las distintas asociaciones vecinales implicadas.
Ahora se abre el proceso para redactar el plan, del cual estará muy pendiente el Ayuntamiento de Corvera para conocer la información que se detalle en él de cara a la realización de las obras. No existe un plazo concreto para llevar a cabo la ejecución por lo que desde el Consistorio se toma con cautela, sin dar fechas. "No será de hoy para mañana, llevará un tiempo y puede que se realice toda la obra en un año o por tramos, también hay que ver cuál será la inversión total, pero lo que sí vemos es que estamos más cerca que nunca de lograrlo", aseveró Fernández.
El gobierno local, eso sí, aplaude el primer paso en firme para finalizar con una problemática acústica que afecta a numerosos vecinos del concejo. Tras numerosas quejas vecinales, el Ayuntamiento de Corvera tomó cartas en el asunto para demandar este problema en el año 2017, instante en el que realizó su demanda ante el Ministerio de Fomento. Recuerda el Alcalde que "por entonces estaba el Partido Popular y ahora el gobierno cambió y está el PSOE". "Pero esté quien esté seguiremos cumpliendo nuestra palabra hasta solucionar este problema", añadió.
Y es que los vecinos de los edificios más próximos a la "Y" sufren diariamente niveles de ruido que superan los 80 decibelios, pudiendo provocar a largo plazo, entre otras, lesiones de oído. Tras la adjudicación anunciada ayer, el problema parece más cercano a resolverse.
