El fuerte aguacero caído durante la mañana del domingo en la zona de La Ribera de Luanco ha puesto en entredicho el plan de actuación en caso de lluvias torrenciales. Por ello, los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Gozón ponen sobre la mesa algunas propuestas de cara a evitar las imágenes vividas en las calles de Gijón, Marcelino Rodríguez, Conde del Real Agrado y San Juan, en donde una gran inundación colapsó una de las zonas más transitadas de la localidad. "Creemos que hace falta ampliar el plan de emergencias que se puso en marcha en 2016 para temporales marítimos e incluir también el riesgo por fuertes precipitaciones", expone el grupo gozoniego de IU.

El partido encabezado por Ana Ruiz considera que la situación vivida el domingo "no se puede considerar un hecho puntual" recordando que la localidad luanquina ya ha vivido situaciones similares durante 2014 y 2016. Vecinos de la zona achacan las inundaciones a la falta de conductos hacia la playa de La Ribera para evacuar el agua de la zona que, debido a encontrarse a un nivel más bajo, acumula grandes cantidades.

Otra de las problemáticas apreciadas por IU fue la circulación de coches en esta zona cuando el agua cubría prácticamente la totalidad de la altura de las ruedas. "Se debió cortar el tráfico, era una situación peligrosa y que, además, agravaba la entrada de agua en los bajos", sostienen desde IU. Una medida que también apoya Vox por mediación de la edil Tamara Fernández.

En su caso, denuncia que "se debe de tener un protocolo de urgencia para estos casos y hay que recordar que Gozón es algo más que Luanco, ya que hubo desprendimientos en otras zonas del concejo y no hubo actuación alguna". El otro partido de la oposición, el PP, también considera que existe un problema claro en la zona y, a pesar de que entiende que "una situación como la del domingo es difícil de darle solución", el portavoz Ramón Artime considera que "si hay una solución y dinero suficiente para ejecutarla, hay que tratar de minimizar los daños".

Durante el día de ayer no hubo que lamentar ningún tipo de daño material a causa de las lluvias, pero los vecinos de Luanco se mantienen alerta para combatir los aguaceros de la mejor forma posible. Otros asumen en la zona que "contra la naturaleza, por mucho que lo tratemos, a veces, no se puede luchar". Y es que la fuerte lluvia caída durante la mañana del domingo obligó a evacuar de bajos y calles 80.000 litros de agua.