"Se termina hoy mi largo viaje a Ítaca, como a lo largo de este año ha ido terminando el vuestro, el de quienes habéis culminado la trayectoria profesional a lo largo de estos últimos doce meses". Así, después de leer "Ítaca", uno de los más clásicos poemas del escritor Konstantin Kavafis, el por el momento gerente del área sanitaria III, Enrique González, se dirigió a sus compañeros que se jubilaron a lo largo de este año. Lo hizo desde el atril del salón de actos del Hospital San Agustín ayer por última vez antes de su retorno a su puesto de trabajo, la jefatura del servicio de atención al ciudadano. El Principado le ha cesado en el cargo.
El discurso de González estuvo plagado de alusiones al poeta griego más importante de los últimos siglos y fue un canto a la lealtad. Brindó su agradecimiento a quienes le acompañaron en sus distintas responsabilidades públicas en las últimas décadas, desde mediados de la década de los ochenta. Subrayó, sin embargo, a los que lo hicieron "lealmente" porque declaró que considera que la lealtad "es un valor imprescindible en cualquier organización". Señaló también que la "lealtad a la organización admite "la capacidad crítica y la exigencia de hacer mejor las cosas cada día, defendiendo las ideas para mejorar, sin mirar si gustan o no a quien más poder tiene".
Todo esto lo dijo ante buena parte de los sesenta jubilados de este año: 13 médicos, 16 enfermeras, un fisioterapeuta, 14 auxiliares de enfermería, cuatro administrativos, cuatro auxiliares administrativos, cuatro celadores, una telefonista, un pinche, una lavandera y una planchadora. Todos ellos recibieron "un detalle", en palabras de José Manuel Román Ferreiro, el jefe de personal del área sanitaria, que, de nuevo, ejerció de maestro de ceremonias de la fiesta de reconocimiento a los trabajadores en su último año de servicio.
La entrega de ese detalle corrió de la cuenta del propio González, del presidente de la junta de personal, David Menéndez, de la jefa de enfermeras, Covadonga Noriega, y de Cruz Prada, de la recién creada asociación de trabajadores del área sanitaria de Avilés.
Enrique González resumió el trabajo que ha coordinado en su momento: "Estos tres últimos años han sido muy intensos. Hemos avanzado de forma clara en muchas cuestiones organizativas, asistenciales, de infraestructuras y equipamiento. Hemos innovado en organización con los médicos eventuales de atención primaria, hemos innovado en la organización de las unidades hospitalarias, hemos incorporado profesionales -un 5,59% en tres años-, y hemos implantado proyectos singulares a nivel nacional como el Plan de Atención al Paciente Institucionalizado. La alta valoración que los ciudadanos tienen de la atención sanitaria en esta área es producto de vuestro trabajo, porque todos esos proyectos se han traducido en realidades, gracias al compromiso de los profesionales que los habéis llevado a cabo".
La fiesta de los jubilados y la despedida de Enrique González contó con la voz de la cantante Anabel Santiago y la guitarra de Julio Gilsanz. Tras ellos, aplausos para todos.
