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La huella digital: llave en Avilés para acceder al gimnasio o pagar el autobús

El proyecto, financiado por Europa, permitirá identificarse en instalaciones municipales sin más documentos y con garantía de seguridad y privacidad

La huella digital: llave en Avilés para acceder al gimnasio o pagar el autobús

Avilés es una ciudad digital. Al trabajo desarrollado en los últimos años se suma ahora la plataforma de identidad digital, un ambicioso plan que tiene un fin: conseguir que a través de la huella digital cualquier vecino pueda entrar en el polideportivo del Quirinal, acceder al casco histórico con el coche en la zona de bolardos, sacar un libro de la biblioteca pública o pagar el autobús, entre otras actividades cotidianas. La empresa Telefónica Soluciones de Informática y Comunicaciones S. A. ha sido, de entre cuatro, la elegida para desarrollar el novedoso proyecto que salió a licitación por 150.000 euros y fue adjudicado finalmente por 91.574 y que está incluido en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (DUSI) y que cuenta con financiación de los fondos europeos Feder.

La nueva tarjeta ciudadana, un instrumento que recogerá toda la información en un único dispositivo, previsiblemente comenzará por el desarrollo de una aplicación móvil que permitirá al ciudadano acceder con la identidad digital a todos los departamentos municipales. Pero en el futuro se prevé añadir servicios gestionados por entidades ajenas u organizaciones contratadas que no dependan del Consistorio. El sistema que se utilice, por tanto, tendrá que estar diseñado de tal manera que se puedan incorporar con facilidad nuevos servicios.

Como informó este periódico, en fases posteriores se irá implementando la tecnología para el acceso a los autobuses del Consorcio de Transportes o para el pago de la zona azul. La nueva tarjeta ciudadana incorporará la tecnología Blockchain (cadena de bloques o cadena articulada), que garantiza la seguridad y la privacidad de los pagos y permitirá seguir la huella digital. El plan se enmarca dentro el proyecto "Smart city" o ciudad inteligente, con el que se busca tomar decisiones de manera informada por parte de la administración y que los ciudadanos y empresas tengan acceso a multitud de datos y servicios.

Un ejemplo de lo que se puede llegar a conseguir con la tecnología es Santander, cuya alcaldesa, Gema Igual, explicó en un congreso que se celebró hace un par de años en Avilés cómo ya en 2008 su ciudad se marcó el objetivo de ser una "smart city" al poner la tecnología al servicio de los ciudadanos. "Nos embarcamos en el proyecto y fuimos de las primeras ciudades en hacerlo. Pero para ello también tuvimos que hacer una labor didáctica para sensibilizar a los ciudadanos y explicarles cómo iba a mejorar su vida esa tecnología", comentó. Allí tienen sensorizados desde el riego de los parques hasta la red de tuberías, pasando por los contenedores o los autobuses. "Sabemos, por ejemplo, cuándo está lleno un contenedor y hay que pasar a buscarlo y si no lo está, pues se puede cambiar la ruta del camión y no molestar a los vecinos", explicó la regidora cántabra como ejemplo de a tecnología que ahora llegará a Avilés.

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