Las plantillas de las principales empresas industriales se han manifestado este miércoles en Madrid para reclamar al Gobierno central medidas que garanticen el futuro del sector. La movilización transcurrió en dos escenarios, con una protesta ante el Congreso de los Diputados, que propició encuentros de los manifestantes con distintos portavoces de los grupos parlamentarios, y con una caminata entre los ministerios de Transición Ecológica e Industria para exigir "un Pacto Estatal por la Industria y la publicación inmediata del Estatuto del Consumidor Electrointensivo". Los trabajadores reivinidicaron en Madrid que "estamos ante un compromiso de Estado. Un país sin industria no tiene futuro y eso es lo que necesitamos garantizar".
La manifestación ha contado con presencia destacada asturiana, ya que se ha desplazado hasta la capital de España personal de ArcelorMittal, Alcoa-AluIbérica y Asturiana de Zinc, entre otras empresas, así como también hay representación de Siderúrgica Sevillana, Acerinox, Ferroatlántica, Celsa, Sidenor o Solvay. Quince autobuses, con unas mil personas a bordo, llegaron esta mañana a Madrid para participar en una cita que ha estado convocado CCOO y UGT y USO. La estimación global habla de unos 5.000 manifestantes en la capital de España.
La marcha, que discurrió tranquila por la Castellana, comenzó a las 12.00 horas ante la sede del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico y llegó hasta el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Una vez allí una representación de los manifestantes se reunió con la secretaria de Estado de Energía del Ministerio para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, y con el Secretario general de Industria, Raúl Blanco.
El secretario general de CCOO de Asturias, José Manuel Zapico, insistió durante la marcha en que la industria regional necesita que el Gobierno de Pedro Sánchez cumpla "con su compromiso de aprobar cuanto antes un estatuto para las empresa electrointesivas porque necesitamos precios de la luz estables, competitivos y predecibles, para que el tejido industrial de Asturias permanezca y se deje atrás esta etapa de emergencia". Respecto a la financiación europea de la transición energética, Zapico refrendó la idea de que para Asturias es vital "que se garantice una transición justa y que la Unión Europea no beneficie a quien no cumple con sus deberes".
Raúl Blanco, secretario de Estado, confirmó tras la reunión que sólo podían transmitir a los representantes sindicales "el compromiso inequívoco del Gobierno de aprobar el estatuto de las industrias electrointensivas en próximas fechas. Los trabajos están muy avanzados, aunque faltan trámites en la Comisión Europea, ante el organismo que regula los mercados y la competencia, pero somos optimistas que pueda estar disponible pronto. Fue un compromiso reforzado en el debate de investidura porque, de hecho, forma parte del acuerdo de apoyo a la investidura con diversos grupos políticos". Dicho lo cual, Blanco trasladó también una parte de la responsabilidad en agilizar esa aprobación a los diputados españoles: "Esperamos que, una vez completados los informes, haya también responsabilidad en el Congreso para que los grupos parlamentarios tramiten con celeridad el estatuto y se puedan aprobar las medidas normativas que lleva asociadas".
Entre los trabajadores que estuvieron presentes en la reunión con los representantes ministeriales estuvo Damián Manzano, secretario general de la sección de Industria de CCOO Asturias. A la salida Manzano y sus compañeros garantizaron su idea de "seguir en la exigencia de que tengamos cuanto antes un estatuto que, sobre todo, tiene que llevar un contenido que impida que se pierdan más puestos de trabajo". Para los trabajadores del sector industrial no caben demoras "ni que surjan problemas que retrasen más una normativa que tiene que ser una solución a medio y largo plazo para nuestras empresas y para que este sector tenga futuro".
Tanto desde Podemos Asturias como desde IU hubo participación en la marcha de los sindicatos por Madrid. Lorena Gil, de Podemos, aseguró que hace falta que se "evite la volatilidad actual" que sufren las empresas electrointensivas y ese marco supondrá una garantía "para el mantenimiento y la viabilidad de la planta asturiana de Alcoa. Ese estatuto es, en definitiva, una medida en defensa de la industria asturiana". Ovidio Zapico (IU) apeló a que "este Gobierno de coalición" sea capaz de aprobar en el menor tiempo posible el estatuto y, sobre todo, "garantice una transición energética que sea justa, ordenada, equilibrada y consensuada con los trabajadores y los territorios".
