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La evolución de la población local

El invierno demográfico se cobró 7.500 habitantes de la comarca en una década

Avilés aporta las cifras más gruesas, con un descenso superior a 6.000 vecinos l Illas, único concejo que crece: suma 5 censados más

El invierno demográfico se cobró 7.500 habitantes de la comarca en una década

La comarca perdió más de siete mil habitantes en la última década. En concreto, un total de 7.575 vecinos. Así se puede concluir a partir de los datos definitivos del padrón continuo del Instituto Nacional de Estadística (INE), recién publicados y que permiten analizar las últimas cifras oficiales de población, correspondientes a 1 de enero de 2019, en relación a su evolución histórica en los últimos 10 años. La caída demográfica registrada en este periodo equivale, por poner un ejemplo, a aproximadamente dos veces la población que actualmente tiene el municipio de Soto del Barco.

Avilés aporta las cifras más gruesas del descenso: pierde 6.060 vecinos en el periodo, los que median entre los 84.242 habitantes que tenía en 2009 y los 78.182 actuales. La caída ha sido una constante a lo largo de la década. La bajada más notable se produjo entre 2013 y 2014, con una merma de 909 habitantes en un año. Entre 2017 y 2018 también fue importante: se perdieron otros 799.

Ninguno de los municipios de la comarca, excepto Illas, escapa al dato negativo. Castrillón cuenta hoy con 22.376 habitantes frente a los 22.894 que tenía hace 10 años. Al echar la cuenta, salen 518 vecinos menos. El concejo experimentó algunos repuntes puntuales, como los 188 habitantes que sumó a través del crecimiento constante que experimentó durante 2010, 2011 y 2012. Sin embargo, a partir de entonces, la línea ha sido descendente de manera continuada.

Curiosamente, Corvera y Gozón han perdido casi el mismo número de habitantes en la última década. En el caso del primero, fueron 406. Y, en el del segundo, 405. También coinciden en lo que respecta a la etapa en la que registraron incrementos poblaciones de manera continuada.

El municipio corverano creció de forma ininterrumpida durante los años 2009, 2010 y 2011, ganando 281 habitantes en ese periodo. A partir de entonces, la curva es descendente, a excepción de 2014, en el que había subido en cuatro habitantes. Actualmente suma 15.549 vecinos frente a los 15.955 de hace una década.

Situación similar se produce en el caso del concejo gozoniego. También crece de forma sostenida entre 2009 y 2011, ambos incluidos, sumando 95 nuevos habitantes. Pero de ese último año en adelante el balance queda con saldo negativo. Según la estadística del INE, en 2009 tenía 10.738 vecinos y hoy se queda en 10.333.

Soto del Barco, por su parte, cuenta actualmente con una población de 3.866 habitantes. Sumaba 186 más hace una década, cuando alcanzó los 4.052.

El panorama en Illas no ha variado mucho, aunque en un concejo de apenas un millar de habitantes cualquier fluctuación es más sensible. Tiene el mérito de ser el único municipio de la comarca que gana habitantes en el periodo analizado, aunque solo sean cinco. Pasa de los 1.009 de hace diez años a los 1.014 que tiene hoy. Llegó a contar 1.048 en 2013, el dato más alto de la serie analizada, después de crecer de manera sostenida desde 2010. A partir de 2014, las cifras han ido hacia abajo.

Los datos del INE tampoco son positivos si lo que se compara es la evolución del último año. De 2018 a 2019, Avilés perdió 533 habitantes, Castrillón 88, Corvera 172, Gozón 94 y Soto del Barco 21. En este caso, Illas también baja, desde los 1.022 que tenía entonces hasta los ocho menos que le conceden los últimos datos oficiales.

Menos partos y empleo

La evolución de la población de la comarca es una preocupación de los distintos gobiernos locales desde hace años. De hecho, en Avilés, uno de los ejes del programa electoral de los socialistas era la apuesta por atraer población y este objetivo sigue siendo una de las prioridades del municipio. Las cifras no acompañan, aunque es cierto que quedan por analizar diversas variables no incluidas en el padrón continuo del INE que expliquen los factores determinantes del descenso poblacional en la comarca.

Entre ellas, datos como el saldo vegetativo, la diferencia entre nacimientos y defunciones en la comarca, o los movimientos de población entre municipios, no incluidos en esta estadística. Como causas del bajón demográfico, también se vislumbran regulaciones de empleo de empresas de la zona o traslados de trabajadores desde lugares como Avilés a otras ciudades, lo que implica, en muchos casos, la marcha de familias enteras.

No obstante, sí existen algunas referencias oficiales al respecto, como las cifras que proceden del Registro de Civil de Avilés, que en el año 2019 contabilizó el doble de muertes que de alumbramientos: 602 nacimientos frente a 1.231 fallecimientos. El año anterior, en 2018, los datos habían sido similares, pues se habían registrado 1.272 decesos y tan solo 660 partos. El año anterior, en 2018, los datos habían sido similares, pues se habían registrado 1.272 decesos y tan solo 660 partos.Los números que proceden del Hospital San Agustín, referencia de la comarca, también permiten hacerse una idea de por qué concejos como Avilés sigue siendo uno de los municipios más envejecidos del Principado. El complejo sanitario cerró 2019 con el menor número de nacimientos desde que hay registro, 700, a distancia de los 788 registrados en 2018.

La línea descendente hacia la caída por debajo de los 78.000

Avilés cayó por debajo de los 80.000 habitantes en 2017, cuando bajó a 79.514 vecinos. Fue un punto de inflexión para un municipio que llegó a contar con 85.696 ciudadanos en 1996, el año hasta llega la serie histórica del padrón continuo del Instituto Nacional de Estadística (INE). En la actualidad, si las tendencias no se invierten, está a punto de bajar otro escalón, el que lleve al concejo por debajo de los 78.000 empadronados. La línea de los años recientes ha sido de descenso continuado. Y acusado. Entre los años 2017 y 2019, el municipio perdió nada menos que 1.332 habitantes, pasando de 79.514 a los 78.182 actuales.

Corvera, Gozón y Soto del Barco, picos máximos en el año 1996

Corvera, Gozón y Soto del Barco alcanzaron picos de población en 1996, el último año al que llega, hacia atrás, la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística. En ese año, el municipio corverano contabilizó16.502 habitantes. En el caso del concejo gozoniego en ese ejercicio se registraron 11.410 empadronados. Mientras, en Soto del Barco también se llegaba a la cifra más alta del periodo analizado, con hasta 4.450 habitantes, 584 más de los que tiene en la actualidad. Por su parte, Castrillón tuvo su hito hace muchos menos años, en 2012, cuando contabilizó 22.950 empadronados, una cifra muy cercana a la de la actualidad, de 22.894.

En Illas, un centenar menos cada diez años

El municipio menos poblado de la comarca, Illas, ha perdido algo más de 200 habitantes en las dos últimas décadas. En 1996 contaba con 1.225 habitantes frente a los 1.004 actuales. Su serie es siempre descendente, excepto el periodo de incremento 2011-2013.

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