La viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, visitó ayer las obras que ejecuta con urgencia su departamento para restaurar la última "mordida" del río Nalón al entorno de la depuradora, en una zona conocida como El Recodo entre la vieja cantera del Piélago y la isla de Arcubín. Arropada por el alcalde sotobarquense, Jaime Menéndez Corrales y el director de la Junta de Saneamiento, Juan Fernández Pereiro, Roqueñí se desplazó a pies del Nalón, donde están trabajando las máquinas. "La obra es de emergencia porque había un colector a punto de romper, completamente descalzo. Ahora hay que analizar la actuación en su conjunto y ver qué problemática a mayores puede tener la ribera con este trabajo que está haciendo el río", explicó.

Menéndez Corrales precisó que en un futuro se requerirá de una actuación más ambiciosa. Pero por ahora "lo principal se está haciendo, que es asegurar que el río no se acerque a la depuradora, porque si no correría peligro toda la instalación". A principios de enero los vecinos de Soto del Barco advirtieron ya del mal estado de la zona conocida como El Recodo, completamente inundada debido a las fuertes lluvias caídas durante los meses de noviembre y diciembre. El río Nalón borró del paisaje lo que debería ser un camino que une La Veiga y El Recodo, junto al que se encontraba un área recreativa. También "descalzó" un colector de la depuradora que ahora se está corrigiendo.