Una multa de 1.440 euros y evitar la cárcel. Esa es la pena que ha aceptado esta mañana el avilesino acusado de guardar pornografía infantil en su teléfono móvil. El procesado, que se ha confesado autor de un delito de corrupción de menores, ha asumido también un año de libertad vigilada y dos de inhabilitación para trabajar con menores en una vista celebrada en los juzgados de Avilés.

Según el relato de la Fiscalía aceptada por el procesado, el 25 de septiembre de 2018 se encontró en el teléfono móvil del acusado diverso material pornográfico con menores de edad. Según se ha podido saber tras las investigaciones pertinentes, el material había sido obtenido a través de un programa de intercambio de archivos y la plataforma de mensajería Telegram. En su primer escrito, el Ministerio Público decía también que el material hallado en el teléfono era susceptible de ser compartido con otros usuarios en la red; si bien, el Fiscal ha modificado esta última parte en la sesión celebrada hoy.

El Ministerio Fiscal solicitaba para el acusado una pena de 2 años de prisión, inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo, 3 años de libertad vigilada y 5 años de inhabilitación especial para el ejercicio de cualquier profesión que implique contacto con menores; así como al abono de las costas procesales.

Finalmente, el inculpado no tendrá pena de prisión. Eso sí, deberá abonar 1.440 euros de multa, no podrá trabajar con menores durante los próximos dos años y estará en libertad vigilada durante un año. La sentencia ya es firme.