"La Curtidora ofrece espacios a un precio competitivo y la posibilidad de establecer relaciones con otros empresarios en un ambiente muy familiar". Habla la voz de la experiencia. La de José Antonio Martínez, director técnico del grupo TAM, las siglas de Tecnología y Análisis de Materiales, que nació en 2006 al abrigo del centro empresarial avilesino que este 2020 cumple su primer cuarto de siglo. Martínez repasó ayer el crecimiento de su empresa y la importancia que tuvo La Curtidora en esa progresión en una charla organizada por la asociación cultural La Serrana.
Tal como recuerda Martínez, en aquel 2006 tanto él como los otros dos integrantes de TAM tuvieron claro bastante pronto que La Curtidora era el lugar idóneo para asentarse. "Sobre todo nos ofrecía la posibilidad de empezar a trabajar de manera inmediata, ya que evitábamos todos los trámites administrativos de licencias y otros papeleos", recuerda este ingeniero de Minas avilesino, que encontró en Los Canapés la nave industrial que permitió el nacimiento de su empresa.
Destaca que el ambiente en el centro empresarial era "muy familiar", aunque reconoce que ellos eran los bichos raros de La Curtidora. "Éramos la única empresa eminentemente industrial y prácticamente no había ninguna empresa que nos pudiese prestar servicios en aquellos momentos", relata sobre una realidad que cambió según pasaron los años y TAM fue creciendo. "En cuanto hubo empresas que podían realizarnos algún tipo de trabajo lo contratamos con ellos. No tuvimos dudas. Al final, conoces a la gente, tomas el café con ellos, coincides en las charlas y actividades que organizan... Y eso te permite que conozcan mejor tus necesidades y que sea todo mucho más fácil", indica.
TAM abandonó La Curtidora en 2012 con destino al Polígono Empresarial del Principado de Asturias (PEPA), si bien, en 2015, con la fundación de sus dos filiales ITS y EO, volvieron al centro empresarial. Ahora planean unificar todas sus divisiones en el PEPA. "Como polígono nos parece el mejor de Asturias: está cerca del aeropuerto
Delegación alemana
Además, una de las posibilidades que barajan desde TAM es que sus instalaciones en el PEPA puedan ir a más a corto plazo. Y es que uno de sus principales clientes extranjeros, una multinacional alemana a la que prestan servicios de consultoría de ingeniería, ha abierto la puerta a abrir una suerte de delegación en Avilés. "La idea sería traernos gente de Alemania y trabajar para ellos desde aquí", relata sobre un plan que aún está por madurar.
El proyecto que desde TAM también esperan se cocine un poco más es el del PEPA II, la ampliación del polígono a costa del suelo liberado por baterías: "Podríamos estar interesados en esos terrenos, pero aún no sabemos exactamente cómo se va a desarrollar, qué tamaños y qué precios tendrán las parcelas...".
Uno de los propósitos del gobierno local es que en ese terreno pueda instalarse una gran empresa que sirva de tractor para la zona, algo que también es visto con buenos ojos por los de TAM. "Sería una muy buena noticia para todos, aunque habría que ver qué tipo de empresas y en qué sector se movería esa nueva firma", expresa el avilesino.
