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Actividad cultural en la ciudad

El Museo de la Historia Urbana recibe una media de 18.000 visitas anuales

El centro supera las 125.000 entradas desde que abrió en 2013

Detalle de la réplica del canapé en el museo avilesino. RICARDO SOLÍS

El Museo de la Historia Urbana de Avilés, desde su inauguración el 9 de mayo de 2013, ofrece visitas con el fin de dar a conocer la historia de Avilés a través de innovadores recursos didácticos repartidos estratégicamente por sus instalaciones. Y el éxito es rotundo: más de 125.000 personas han pasado por el centro ubicado entre La Ferrería y la plaza de Camposagrado, lo que convierte a este centro cultural, el primero público abierto en el concejo, en uno de los más visitados de la región con una media de casi 18.000 visitantes al año.

Los dos públicos principales son los propios avilesinos que quieren conocer su historia y patrimonio y también los turistas. El Museo, por su tamaño, se recorre en poco más de una hora.

Por el Museo pasan también infinidad de visitas guiadas, con asociaciones y entidades de todo tipo de Avilés, del resto de Asturias y del país. Asimismo destaca la presencia de grupos escolares de prácticamente todos los concejos de Asturias, que además de visitar el Museo de la Historia Urbana de Avilés recorren el casco histórico, el centro de interpretación de La Carriona y el Centro Niemeyer.

Bajo la batuta de Vidal y Juan Carlos de la Madrid, el Museo ha sido concebido como una herramienta para que los visitantes, tanto turistas como vecinos, salgan después a las calles de la ciudad con el conocimiento necesario para interpretar lo que ven. Los medios que han empleado para condensar más de mil años de historia conjugan técnicas y sistemas de representación. La conexión entre el interior y el exterior es otro de los elementos más importantes, y está materializada en un gran balcón que abre hacia la plaza de Carlos Lobo y que ofrece una perspectiva de la iglesia otrora conocida como la de los Padres. La ría es el hilo conductor de las cuatro etapas en las que se condensa la historia.

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