Los ocho últimos tripulantes del "Severnaya Zemlya", el buque ruso que permanece amarrado en los muelles de Valliniello desde mayo de 2018, regresan hoy a su país. Otros seis marinos partieron hacia Rusia el pasado día 6. Durante estos casi dos años, se han producido relevos en la tripulación del mercante, que quedó retenido en Avilés por una orden de embargo relacionada con deudas de la empresa armadora, Murmansk Sg Co. La Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), en contacto con los marinos y con el Puerto avilesino, ha supervisado las gestiones de repatriación, que corren a cargo del propio armador.
"Esperamos que no vuelva a ocurrir un caso así. Siguen produciéndose abandonos de buques y de tripulaciones", señaló la coordinadora de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), Luz Baz.
El "Severnaya Zemlya", ahora propiedad del Estado, lleva casi 23 meses amarrado en el muelle de Valliniello. La Autoridad Portuaria ha iniciado los trámites para que una empresa se haga cargo de la seguridad del buque hasta encontrar una solución. Pocas esperanzas quedan para una venta directa tras haber quedado desierta la subasta. Los gestores portuarios no descartan una nueva tasación del mercante como chatarra. En el mejor de los casos, en el Puerto de Avilés ya dan por hecho que el "Severnaya Zemlya", que acumula una factura de más de 700.000 euros, seguirá en Valliniello otros seis meses.
