El servicio municipal de Parques y Jardines de Avilés ha elegido de entre las múltiples alternativas al uso de herbicidas convencionales para controlar el crecimiento de la vegetación indeseada en los espacios públicos de la ciudad el uso de un producto novedosos en el mercado que se presenta como "ecológico" y lleva por nombre "Segador". Este producto, según confía el servicio de Parques y Jardines, restará penosidad al actual trabajo de los miembros de la brigada encargada de tener a raya las hierbas que invaden espacios públicos como el cementerio, entre otros. Estos trabajadores se quejaron hace semanas por tener que arrancar los hierbajos a mano o con rasquetas dado que el Ayuntamiento les prohibió seguir usando los herbicidas a base de glifosato que constituían, hasta el momento de la prohibición, su gran aliado contra el "enemigo verde".su gran aliado contra el "enemigo verde".
El veto municipal a los herbicidas con base de glifosato (la mayoría de los que hay en el mercado y los más eficaces) data de 2016 y fue consecuencia de un ruego conjunto de las formaciones políticas Somos (marca blanca de Podemos en Avilés) e IU que el gobierno socialista avilesino consideró oportuno tener en cuenta. El problema es que, prohibido el uso del glifosato, no se dieron alternativas a los trabajadores de Parques y Jardines, que al cabo de tres años se hartaron de arañar suelos y parterres para quitar las malas hierbas. El partido Ciudadanos se hizo eco del malestar de la plantilla el pasado otoño y el concejal del área, Pelayo García, prometió "buscar una solución con ayuda del jefe técnico de Parques y Jardines".
La solución podría ser el uso de "Segador", un compuesto químico que está registrado como "fitosanitario ecológico". Su base activa, según la empresa fabricante, es un "complejo de hidroxifosfato natural bajo la forma de emulsión con un tensioactivo natural depresor de la actividad del agua, lo que provoca un efecto desecante en las plantas". La aplicación del producto es foliar (en las hojas) y provoca la desecación de las hierbas tanto de hoja ancha como estrecha; se puede aplicar en cultivos donde los herbicidas sistémicos convencionales darían problemas. El fabricante asegura que "Segador" no contamina el medio "porque se degrada en sustancias naturales" y que actúa del siguiente modo: "En una primera fase retarda el crecimiento de las plantas, lo que permitiría, si ese fuese el deseo, no tener que matarlas. En caso de perseverar con el tratamiento, sí que llega a matar la vegetación tratada".
El servicio municipal de Parques y Jardines ha adquirido varias unidades del "herbicida ecológico" y está poniéndolo a prueba en el vivero de La Lleda. Si los resultados son satisfactorios, se permitirá a la brigada de mantenimiento de zonas verdes usarlo en sus tareas. Otras alternativas tenidas por "ecológicas" que fueron consideradas para su uso en Avilés son las deserbadoras mecánicas (desbrozadoras de baja potencia), máquinas de infrarrojos que causan daños celulares a las plantas o máquinas con tubos lanzallamas que literalmente queman las hierbas. Son ideas que, de momento, quedan en la recámara.
