Cuatro años de prisión y una indemnización de 50.000 euros. Esa es la pena acordada por los familiares de Aladino López y A. G. G., el joven que propinó una brutal paliza al excuponero en Piedras Blancas el 3 de enero de 2018. En la sentencia se consideraron atenuantes una alteración psiquiátrica y un estado de intoxicación etílica por parte del agresor.
Según el fallo judicial, A. G. G. se reconoció autor de la brutal paliza que acabó con la vida de López a las puertas de una confitería de Piedras Blancas. La sentencia relata que el procesado golpeó en reiteradas ocasiones la cabeza de López a base de puñetazos y patadas pese al intento de mediación de un empleado del obrador. A. G. G. manifestó que el fallecido le decía que un tío suyo -del agresor- debía haber "muerto antes". También que cuando estaba en el suelo, inmóvil y sangrando por la comisura de la boca, López le llamó "hijo de puta".
El tribunal consideró probado que A. G. G. padece un trastorno por déficit de atención e hiperactividad que le hace ser muy impulsivo y carecer de autocontrol y que, además, el día de los hechos había ingerido mucho alcohol.
Fruto de los golpes, la víctima sufrió diversas fracturas y traumatismos en la cabeza, así como hemorragias internas. A causa de esas lesiones, López acabó falleciendo el 3 de junio de 2018. Tenía 58 años.
Además de los cuatro años de prisión, la víctima habrá de indemnizar con 50.000 euros a dos hermanos de López. El tiempo que el condenado lleva en prisión preventiva, desde el 5 de enero de 2018, será descontado de los cuatro años de cárcel a los que ha sido condenado. Además, una vez finalice el periodo de reclusión estará durante dos años bajo libertad vigilada. Asimismo, el reo también ha sido condenado por el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial a abonar las costas procesales.