El alquiler de locales comerciales en la ciudad no despega. Los negocios cierran, pero los espacios que abandonan no encuentran nuevos inquilinos que los vuelvan a abrir. Este mercado está "muy parado, no se mueve" aseguran los responsables de la inmobiliarias, que explican que "solo aguanta" el eje de la calle La Cámara que, no obstante, también ha vivido tiempos mejores, a juicio de algunos de los profesionales del sector.
"El alquiler de locales está muy bajo. Parado. Y eso que hay propietarios que han bajado mucho los precios. Por poner un ejemplo, en la calle Fernández Balsera los hay de 60 metros cuadrados por 300 euros al mes, que eso nunca se ha visto. Y aún así no se alquila. Vas por algunas calles y no se ven más que locales cerrados. En la ciudad, en calles incluso próximas al ayuntamiento, y también en los barrios", explica Sonia María Cano, de la Inmobiliaria Palacio Valdés, que se refiere a la insuficiencia de ayudas y al elevado coste que supone establecer un negocio cuya puesta en marcha suma licencias municipales y obras de adecuación cada vez con mayores exigencias en materia de accesibilidad y salubridad, circunstancias que, apunta, "echan para atrás a la gente".
Javier García, de la Inmobiliaria Graíño 35, señala que en el eje comercial por excelencia de la ciudad, la calle La Cámara, las cosas se mantienen, "aunque ya se ocupó mejor que se ocupa". Los precios son altos: un local de unos 50 metros cuadrados supera con facilidad los mil doscientos o mil trescientos euros, "que ya son palabras mayores". "Pero si te vas a otras zonas, la cosa cambia. En Fernández Balsera, por ejemplo, hay locales por 300 o 400 euros. Esa zona funciona bien hasta el lugar donde se ubica Supercor, a partir de ahí es difícil que abra un negocio: la prueba es pasar por allí y ver cuantos locales vacíos hay", señala García.
Similar opinión manifiesta Carmen Pérez, de la inmobiliaria La Cámara, que señala que a excepción de la calle en la que su ubica su propio establecimiento, en el resto "cada vez cierran más locales que no se vuelven a abrir". "Hay calles enteras vacías, zonas más o menos céntricas que siempre tuvieron gente, como las calles Palavio Valdés, Pablo Iglesias, Fernández Balsera. Hay que pasar por allí para ver como están...", explica.
A su juicio, no se ha perdido vigor en la calle de La Cámara, donde "si un local cierra, rápido se alquila y lo ocupa otro". Eso sí, los precios en esta zona son muy elevados, al nivel de los alquileres de otras grandes ciudades asturianas como Oviedo y Gijón.
El precio del alquiler por metro cuadrado en el gran eje comercial de Avilés oscila entre los 40 y los 65 euros, según señala Pérez. Hay locales en la zona que superan los dos mil euros y otros que andan algo por debajo. No obstante, el coste puede variar en función de muchas circunstancias, aclara la responsable de esta inmobiliaria, que matiza que, además, cuanto más pequeño es el local más puede elevarse el precio y cuanto más grande más puede descender. "Si es pequeño sigues pagando la zona, pero si, por ejemplo, son más de 100 metros no te van a poner el mismo precio que si lo que alquilas es uno con la mitad de metros", matiza.
Laura Camporro, responsable de la oficina de Reines Avilés, incide en la misma idea. "Los locales muy céntricos no suelen tener problemas para estar activos, aunque sí es verdad que en los últimos seis meses se ve que hay un declive de demandas para alquilar, tanto para emprender nuevos negocios como para trasladarse", señala.
"Un local que no esté muy bien situado, como no tenga una renta muy competitiva, está cerrado.Y hay propietarios de más de un local, que siempre los han tenido en funcionamiento, que ahora se ven con el local parado, por lo menos en el último año. En el centro las rentas siguen siendo bastante sustanciosas, pero en cuanto te lalejas ya un poco del cogollo, la dificultad para alquilar es mayor", añade.
La situación del sector forma parte de la agenda municipal: el Ayuntamiento ha abierto una convocatoria de ayudas para empresas que hayan iniciado su actividad económica en un local a pie de calle durante 2019 y también para las que hayan realizado actividades de expansión comercial. Establece una ayuda por un importe máximo de 2.000 euros, que deberán ser destinados a sufragar gastos derivados del inicio de la actividad como el pago del alquiler del local. Pueden solicitarse hasta el 31 de marzo de 2020. Estas ayudas a fondo perdido son complementarias a la línea de préstamos que el Consistorio ha encomendado a La Curtidora para iniciar una actividad comercial en locales cerrados.
