Golpe a la delincuencia en Avilés. La Policía Local de Avilés detuvo en la madrugada de ayer a un avilesino de 33 años en el interior de una peluquería de la calle Gutiérrez Herrero a la que había accedido, explican, haciendo uso de la tapa de una alcantarilla. El fin, según los agentes, era sustraer la caja registradora del negocio. La rápida actuación de la patrulla permitió detener al autor de estos hechos en el interior del establecimiento.

Anteayer se produjo otro caso similar en un supermercado de La Luz y en las últimas semanas han pasado de ser esporádicos a habituales los robos con fuerza en los negocios de la comarca, lo que ha llevado a los vecinos y empresarios a reclamar mayor vigilancia policial. En el caso de La Luz, los hechos ocurrieron en la madrugada del lunes cuando dos encapuchados entraron en un supermercado de la calle Hernández Cortés tras romper una de sus lunas con la tapa de una alcantarilla. Finalmente, la complejidad de la caja registradora y los gritos de los vecinos ahuyentaron a los ladrones, que se fueron con las manos vacías. Lo que no sabían los cacos es que no lo iban a tener nada fácil. En primer lugar, porque el establecimiento contaba con unas cajas registradoras estancas que impiden el acceso al dinero. Aunque ese contratiempo pareció no importar a los amigos de lo ajeno, que trataron de llevarse la maquinaria al completo pero el estruendo puso en alerta a los vecinos.