"La normalidad volverá a las instalaciones de Saint-Gobain Cristalería una vez finalicen las restricciones sanitarias y el Estado de Alerta". Es la promesa de la dirección de Saint-Gobain al respecto de la paralización de su actividad en la fábrica de vidrio de La Maruca (Avilés), que da empleo a 470 personas a los que hay que añadir los trabajadores de las empresas subcontratistas. El personal será regulado temporalmente mediante un ERTE que han suscrito los sindicatos CC OO y UGT y que ya afecta a los 200 operarios de la línea de parabrisas; el resto de la plantilla se queda a la espera del curso de los acontecimientos.

La dirección de Saint-Gobain Cristalería alcanzó la tarde del jueves un acuerdo con los sindicatos antes citados para la aplicación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por razones de causa mayor en sus instalaciones de Avilés y Arbós (Tarragona), consecuencia de la epidemia de coronavirus que azota España y que afectará a más de 800 trabajadores de ambas instalaciones.

Los responsables de los trabajadores y la dirección de la vidriera han estado negociando durante dos largas jornadas hasta alcanzar un acuerdo que ambas partes definen como "satisfactorio" en estos difíciles momentos de emergencia sanitaria. Saint Gobain subraya que "ahora más que nunca, es necesario mantenerse unidos para superar la situación y garantizar la continuidad de los negocios".

La dirección de Saint-Gobain Cristalería dice, en un comunicado emitido anoche, haber apostado por el diálogo y la negociación con los representantes de los trabajadores "a pesar de no ser necesaria la negociación en este tipo de ERTE, al tratarse de una situación consecuencia de la grave emergencia sanitaria que está suponiendo en nuestro país el COVID-19".

En este sentido, la dirección de la compañía agradece a los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO), Unión General de Trabajadores (UGT) y Confederación General del Trabajo (CGT) (este último con representación en la planta de Arbós) su "compromiso sincero con la compañía y la plantilla de Saint-Gobain Cristalería al haberse solidarizado y unido en esta difícil situación de emergencia, una muestra de madurez y comprensión de estos tres sindicatos representados en los comités de empresa". Y recalca que "el objetivo último de esta medida inevitable es la protección de la salud de los trabajadores y el garantizar el mantenimiento futuro de las instalaciones, algo que tanto CCOO como UGT y CGT han comprendido desde un principio".

Por el contrario, la dirección de la vidriera "lamenta profundamente la actitud que viene manteniendo Corriente Sindical de Izquierdas (CSI), que se ha desvinculado del acuerdo y que de manera continuada se dedica a trasladar información incierta o tendenciosa a los medios tratando de perjudicar con ello la imagen de la planta de Avilés y de la compañía, generando intranquilidad en la plantilla".

Afectación a la división de construcción

Además de a la línea de parabrisas (Sekurit), el ERTE de Saint-Gobain alcanza también a sus actividades para el sector de la construcción: "El excepcional escenario sobrevenido por el COVID-19, junto con la implementación de las medidas exigidas por el Gobierno, y el objetivo de contener la propagación de esta pandemia, ha frenado de forma importante la actividad económica en los últimos días. Teniendo en cuenta la afectación actual de las personas que trabajan en sus centros y siendo conscientes de que esta afectación pueda seguir aumentando, Saint-Gobain Building Glass presentará un ERTE a partir de mañana (por hoy, viernes) que cuenta con el respaldo de la representación de los trabajadores de sus tres centros de trabajo, ubicados en Avilés, Arbós y Madrid".

Con esta medida, Saint-Gobain Building Glass "quiere preservar la salud de sus equipos pero además, su implementación en este momento permitirá realizar correctamente, con los medios técnicos y humanos necesarios, la parada de sus instalaciones productivas".

El objetivo último de esta medida "excepcional, temporal y necesaria" es garantizar el mantenimiento de las instalaciones para reanudar la actividad "tan pronto como el escenario de incertidumbre sanitaria vaya remitiendo y el tejido empresarial retome el pulso de la actividad económica". Para poder hacer frente a cualquier situación que pudiera presentarse, la parada de la actividad en sus centros de Avilés y de Arbós se llevará a cabo gradualmente "de conformidad con las necesidades que marcan los propios procesos productivos y de transformación".

En este contexto de incertidumbre, Saint-Gobain Building Glass agradece el apoyo recibido de los representantes de los trabajadores a la decisión tomada e igualmente la comprensión de sus clientes, proveedores y empresas colaboradoras y traslada su apoyo a los afectados, a sus familias y a toda la sociedad.