La Orden Franciscana Terciaria y los Mensajeros de la Paz se encargan al alimón de la Fraternidad de Francisco, en la avilesina la plaza de Santiago López. Las dos organizaciones iniciaron ayer la entrega de más de 20 toneladas de alimentos para un millar de personas en riesgo de exclusión social. La Delegación de Gobierno del Principado de Asturias había aprobado y autorizado la distribución de la comida que había donado la Unión Europea.
Según los franciscanos terciarios (seguidores seculares de San Francisco de Asís), más del 1 por ciento de la población de la comarca se puede beneficiar de la ayuda humanitaria que se canaliza a través del Banco de Alimentos de Asturias.
Las gestiones llevadas a cabo por la Fundación Banco de Alimentos de Asturias y la Orden Franciscana Secular de Avilés han permitido que varios camiones de gran tonelaje descargaran en la sede y almacenes de la Fraternidad de Francisco los alimentos de primera necesidad destinados a los más necesitados. Estos alimentos van de leche, aceite de oliva a conservas, pasta y arroz.
Este reparto se está desarrollando, asegura Agustín Albuerne, el ministro de la orden franciscana terciaria en Avilés, "bajo un robusto y severo protocolo de seguridad". Este protocolo lo ha diseñado Carmen José Fernández Rodríguez, que es experta en el ámbito de calidad, certificación, medicina y nutrición. El reparto lo han hecho nueve voluntarios seleccionados de entre los más de 40 que prestan su servicio altruista en la Fraternidad de Francisco.
Almuerzo
Además, los franciscanos seculares también preparan almuerzos para los más desfavorecidos. Esto lo hacen gracias "a la generosidad de la Fundación Alimerka". Todos los días una bolsa con un almuerzo diario, que incluye fruta, galletas, leche, y bocadillos, entre otros es lo que se pueden llevar los peticionarios: entre las 13.45 y las 14.30 horas.
