Ver para creer. Más de un vecino de Versalles debió de tener que pellizcarse ayer por la mañana cuando se asomó a la ventana. Y es que el espectáculo era, cuando menos, surrealista: un caballo galopando a su aire por las calles del barrio. Finalmente, el animal, que se había escapado de una finca cercana, fue prendido por la Policía Local y devuelto a su propietario, que fue multado.

Según vecinos, todo ocurrió bien entrada la madrugada. Fue en torno a las seis de la madrugada cuando por las calles de Versalles comenzó a escucharse el ruido de los cascos del equino, que estuvo paseándose a sus anchas por el entorno de la calle Gutiérrez Herrero y por la glorieta de Los Oficios, estos días con menos tráfico del habitual por las restricciones del Estado de Alarma.

Ante esta situación y por temor a que el animal pudiese causar algún tipo de desperfecto o resultar herido, los vecinos alertaron a la Policía Local. En torno a las 7.15 horas, una patrulla del cuerpo municipal logró prenderlo con una cuerda y amarrarlo en la glorieta de Los Oficios. Los policías localizaron a su dueño, que se personó en la rotonda de entrada a Avilés para llevarse al animal. Pese a que aseguró que el caballo se le había escapado de manera inexplicable de una finca en Versalles, no logró librarse de una multa.

Pasado el trámite, el hombre se llevó de vuelta a la finca el caballo. El paseo con el equino también levantó gran revuelo y sorpresa entre los vecinos. Fueron muchos los que grabaron desde su ventana el trayecto, por las aceras del barrio avilesino.