Los avilesinos generan un 10% menos de basura desde que comenzó el confinamiento. De las 1.400 toneladas de desperdicios recogidas en las dos primeras semanas de marzo se pasó a 937 en las dos últimas. "El mayor causante de este descenso es el cierre de los establecimientos de hostelería, uno de los grandes sectores generadores de residuos sólidos urbanos", explican fuentes municipales. Donde más se ha notado el efecto del confinamiento es en los residuos depositados en los puntos limpios, con un descenso que supera el 86% por la paralización de pequeñas obras domiciliarias, de los trabajos de siega y poda y por no poder realizar cambios de mobiliario y electrodomésticos en los hogares.