La negociación del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que presentó el Grupo Konecta, con centro de trabajo en Avilés, sigue adelante con tiranteces. Desde el punto de vista de la plantilla local, se ha conocido una buena noticia: de los 60 empleados que en principio planteaba incluir en el ERTE la empresa se ha pasado a 31. No obstante, hay sindicatos como la Corriente Sindical de Izquierda (CSI) que siguen rechazando de plano la medida de ajuste laboral. Según el punto de vista de esta central, Konecta "no ha aportado en las sucesivas reuniones telemáticas mantenidas documentación acreditativa de la necesidad de la medida que pretende llevar a cabo". Así mismo, la CSI cuestiona que el personal a regular es "precisamente el que se halla en situación de incapacidad temporal".