El Puerto de Avilés ha debutado en plena crisis sanitaria con la carga del buque granelero "Pacific Seagull", que llevará hasta el puerto estadounidense de Jacksonville, en el norte del estado de Florida, un total de 50.000 toneladas de ceniza. El material, procedente de la térmica de La Pereda, se utilizará como materia prima para la fabricación de cemento.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Santiago Rodríguez Vega, consideró que esta operación "es una más" y que "no definirá ni marcará tendencia. Se prevé que se realicen dos cargas de este tipo al año en Avilés, no más", precisó. Rodríguez Vega destacó que para esta operación se pusieron a funcionar los cañones pulverizadores de agua, para frenar la posible expansión de la ceniza.
Detrás de este proyecto de exportación de ceniza está la firma Natural Mining Resources (NMR), que entre otros muchos planes en marcha tiene sendos contratos con Hunosa para utilizar el lavadero de El Batán y retirar las cenizas que produce la térmica de La Pereda. Estas últimas las está comercializando en EE UU, donde las van a utilizar compañías cementeras como materia prima en su proceso de fabricación. Estas mismas cenizas, de otra forma, iban a parar a vertederos asturianos sin más uso. El primer envío a Norteamérica salió ayer del Puerto de Avilés desde el muelle de Raíces. El buque "Pacific Seagull", con más de 199 metros de eslora, llegó a aguas avilesinas a finales del mes de abril y durante los últimos días se realizaron las tareas de embarque de ceniza.
Por lo demás, la Autoridad Portuaria mantiene su normalidad. El tráfico portuario se está desarrollando con su ritmo habitual: las navieras han sido informadas de los protocolos de actuación correspondientes en los muelles, complementando las medidas propias aplicadas en los buques. Solo ayer había al menos cuatro buques en operación: "Nova", "Feyz Ambassador", "Meridiaan" y "RMS Baerl" y otros tantos ya habían anunciado su llegada.
