En contra de lo que temían los agoreros, la rula de Avilés lleva camino de repetir, y con un poco de suerte mejorar, el registro de descarga y venta de bocarte que obtuvo en 2019: 665.071 kilos. Hasta el pasado martes no se vio ni un bocarte en la cancha de subastas de la lonja avilesina, siendo la rula de Gijón la que centralizó la comercialización de las capturas dada su mayor cercanía a la zona de pesca de la especie (que se mueve de este a oeste). Pero del martes hasta ayer, la actividad de los barcos que hacen la costera del bocarte tiene el muelle pesquero de Avilés como referente y si el miércoles fueron 200 las toneladas echadas a tierra, ayer se sumaron 240 más, procedentes de la descarga de 44 barcos.
De este modo, ya se han superado los 500.000 kilos de bocarte vendido y con otra jornada como la de ayer se superará la cifra de 2019. En eso confían los responsables de la lonja, en que el pescado aún permanezca unos días más cerca de Peñas y la costera sea positiva para la rula local, que ha acusado los dos últimos meses la pérdida de valor del pescado fresco por el cierre debido al covid-19 de los restaurantes y bares, un sector que contribuye con su demanda a equilibrar el mercado.
