A José Ramón García Alonso todo el mundo le llamaba "Moncho". Era de Turón, en Mieres; trabajó en Carbayín, en Siero y se jubiló en el barrio de La Luz, en Avilés. Allí permaneció más de dos décadas al frente de la parroquia de San Pablo, una de las muchas que nacieron en plenos años sesenta, cuando el concejo tenía que darse de sí para hacer hueco a todos cuantos, de repente, comenzaron a trabajar en la antigua Ensidesa. "Moncho" falleció en la madrugada de ayer en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Tenía 88 años. El funeral se oficia en su iglesia avilesina hoy a las 13.00 horas. Posteriormente, sus restos incinerados -en el tanatorio del Salvador, en Oviedo- irán a su valle natural, concretamente, al cementerio parroquial de la iglesia de San Martín.

"Moncho" se había ordenado en 1960, es decir, llevaba seis décadas como sacerdote. El primer lustro de profesión la desarrolló como salesiano y esto marcó su vida posterior, muy vinculada al apostolado juvenil. Se ganaba la vida como profesor. Lo había sido en el IES de La Luz. Impartía Religión y también Filosofía.

Hasta 1999 se mantuvo como sacerdote en el barrio que levantó el constructor Domingo López. Tras su jubilación, se trasladó a Oviedo, donde tenía un piso. Vivió solo hasta el año pasado, que fue cuando se mudó a la casa sacerdotal. Allí, el lunes pasado, sufrió un derrame cerebral. Sus compañeros le trasladaron, en primer lugar al Centro Médico. De ahí pasó al HUCA, donde falleció en la madrugada de ayer.

El trabajo desarrollado en el barrio de La Luz por José Ramón García Alonso todavía es muy aplaudido por quienes le conocieron. "Moncho" cedió el testigo de su iglesia a Manuel García "Lito", que estuvo en el barrio hasta septiembre de 2007. Entre esa fecha y enero de 2008, la parroquia estuvo dirigida por la vicaría. Entonces fue cuando llegó Bernardo Granda, que fue también capellán el Hospital San Agustín, de Avilés. Posteriormente, la iglesia de La Luz se integró en la Unidad Pastoral de la zona sur de Avilés, primero a instancias de Vicente Pañeda y ahora a cargo de Alejandro del Rey.