La factura de agua del Puerto bajará un 52% con el plan en marcha de aprovechamiento de las aguas pluviales, una de las actuaciones que forman parte del plan de calidad ambiental. El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria aprobó ayer el inicio del expediente de contratación de las obras del Proyecto constructivo de adecuación de la red de aguas pluviales de la dársena de San Juan de Nieva y la construcción de dos depósitos de recogida de aguas de cubierta, con un presupuesto base de licitación de 1,26 millones de euros (sin IVA) y un plan de ejecución de once meses.
La configuración de la dársena de San Juan de Nieva y el muelle de Raíces, en la margen izquierda del Puerto, ha sufrido importantes modificaciones en los últimos años, tanto por la reordenación de espacios como por las concesiones otorgadas en esos terrenos. Estos cambios han obligado a los gestores portuarios a redistribuir y trasladar las redes de servicios existentes, unos cambios que se aprovechan para incorporar mejoras ambientales en la calidad de aguas y del aire del entorno portuario.
Entre esas medidas se encuentra la construcción de depósitos que almacenan el agua de lluvia para aprovecharla en riegos y baldeos, reduciendo así el consumo de agua potable mediante la reutilización de pluviales. El primero de ellos se construyó el año pasado junto a la nave de Asturiana de Fertilizantes y ayer se dio luz verde a los otros dos proyectados.
Se trata de los depósitos 2 y 3, ambos con capacidad de almacenamiento para 350 metros cúbicos de agua de lluvia y que se erigirán junto a la nueva nave de Asturiana de Zinc (Azsa), que tiene una superficie de 24.650 metros cuadrados. Con el depósito número 1 ya en servicio, la Autoridad Portuaria dispone de agua de baldeo durante tres días consecutivos. Los gestores portuarios calculan que una vez estén funcionando los otros dos podrá contar con agua de baldeo o de riego durante seis días consecutivos adicionales. Si las lluvias son constantes, las estructuras se llenan en dos días con una pluviometría media. "La nueva nave de Azsa es una superestructura idónea para recoger el agua de lluvia que cae sobre su cubierta y que se almacene en este tipo de depósitos", defienden desde el Puerto.
El proyecto incluye la construcción de la red de aguas pluviales completa para desaguar los terrenos portuarios de la dársena de San Juan, con la instalación de grandes desarenadores y desengrasadores subterráneos que garanticen el cumplimiento de la normativa de vertidos a la ría y asegurar que sus efluentes lleguen al estuario con la calidad adecuada.
Los consejeros portuarios, que se reunieron ayer por videoconferencia, avanzaron además en los trámites para iniciar la obra para adecentar el acceso al muelle de Valliniello. El plazo de ejecución será de siete meses y el precio base de licitación de un millón de euros (sin IVA).
Es por la margen derecha por donde se exportan las piezas y estructuras de alto valor añadido que fabrican las empresas del Parque Empresarial Principado de Asturias (PEPA), muchas de ellas de dimensiones colosales. Estas firmas venían demandando unos mejores accesos por carretera a esta zona de los muelles. Sus peticiones no han caído en saco roto. Se acondicionarán y ampliarán los viales que unen el polígono y los muelles.
La actuación se desarrollará desde la rotonda de la avenida de la Siderurgia, en el parque empresarial, hasta el control de accesos al muelle de Valliniello, a lo largo del vial que discurre paralelo a la carretera al faro (AS-328) y el ferrocarril de acceso al Puerto. El primer tramo estará preparado para el paso de piezas especiales de un máximo de 50 metros de largo y 18 de ancho y comprende desde la conexión con la carretera al faro, hasta el acceso Sur del Muelle de Valliniello. El segundo tramo comprende desde la puerta de acceso al muelle para piezas especiales y ferrocarril hasta la puerta de acceso a la fase 2 del muelle de Valliniello, donde se ubican el control de acceso con barreras y lector de matrículas.
A lo largo de todo el vial principal se contempla además la reposición de varios accesos para dar servicio a las concesiones existentes en la zona y se habilitan el resto de zonas hasta el límite de la zona de servicio del Puerto para que puedan ser utilizadas por el transporte de piezas especiales, como zonas de espera y aparcamiento reservado para que la Autoridad Portuaria pueda realizar operaciones de control de tráfico o tareas de conservación en la zona. Esta actuación también permitirá ordenar y separar el tráfico rodado del ferroviario mediante la colocación de elementos para evitar accidentes o interferencias entre ambos tipos de tráfico en la zona.
Esta actuación permitirá en un futuro ampliar la zona de explanada de los muelles de la margen derecha, en caso de que sea necesario, simplemente trasladando el cerramiento actual al deslinde de los terrenos portuarios.
El Consejo de Administración dio luz verde igualmente a una nueva subasta para el achatarramiento del buque ruso abandonado en el Puerto y adjudicó en 1,2 millones de euros (sin incluir el IVA) a la empresa Rohde Nielsen los dragados de mantenimiento para el periodo 2020-2023. No está previsto dragar a lo largo de este año.
