El gobierno local de Castrillón no quiere dejar margen de interpretación sobre la normativa restrictiva que regulará este año la celebración de la noche de San Juan (la más corta del año) y con tal motivo comunicó ayer la prohibición tajante y sin excepciones de cualquier hoguera que sirva de excusa para que la gente se congregue a su alrededor, como suele ser tradición en tal fecha como hoy. De este modo, Castrillón se suma a la cautela sanitaria y trata de minimizar, en la medida de sus posibilidades, los focos de contagio de covid-19.
La prohibición de las hogueras de San Juan no coge desprevenidos a las asociaciones vecinales de Raíces Nuevo y La Braña, localidades que suelen celebrar el paso de la primavera al verano y que ya en días pasados anunciaron su renuncia a hacer festejo alguno. Otros lugares en lo que suelen prenderse hogueras son San Juan de Nieva y Arnao, que también habrán de privarse. Y respecto a las playas, especialmente las de Salinas y San Juan, más de lo mismo: no podrá encenderse fuego en la arena y los que lo hagan se arriesgan a ser sancionados por la Policía Local.
