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El Estado urge la modificación urbanística del suelo de Baterías para evitar demoras

El presidente de la sociedad propietaria del solar de la antigua coquería insta a los agentes económicos a colaborar en la captación de empresas

Antonio Miguel Cervera, a la derecha, minutos antes de iniciar la reunión que mantuvo con miembros del equipo local de gobierno, encabezados por la alcaldesa Mariví Monteserín, en el centro de la imagen. RICARDO SOLÍS

El presidente de Sepides, Antonio Miguel Cervera, sigue quemando etapas del plan director presentado el pasado mes de enero en Avilés para convertir el solar de la antigua coquería de Ensidesa (350.000 metros cuadrados de terreno en la margen derecha de la ría) en uno de los polígonos industriales más punteros de España. Finalizada la fase de traspaso del dominio del terreno -que hasta el 31 de diciembre de 2019 estuvo arrendado a ArcelorMittal- y elaborado ya el pliego de prescripciones que hará posible el desmantelamiento de las instalaciones, Cervera avanzó que el mes que viene se publicará la licitación del proyecto técnico de derribo y achatarrado y de los trabajos de demolición propiamente dichos. "Vamos en plazo, según el calendario anunciado", subrayó Cervera durante su comparecencia ante los medios de comunicación en un alto del maratón de reuniones que tuvo ayer con diferentes actores implicados en el suelo de Baterías. Y para que esos plazos se sigan cumpliendo, el presidente de Sepides puso deberes a la Corporación avilesina: "La modificación del Plan Urbano de Avilés, su necesaria adaptación a los nuevos usos del suelo de Baterías, es una de las cosas que me preocupa porque podrían surgir demoras indeseadas".

Las palabras de Cervera instando a que la Corporación avilesina haga su parte del trato tuvieron eco en las declaraciones de la alcaldesa, Mariví Monteserín: "La modificación del Plan General de Ordenación Urbana para dar cabida a este nuevo espacio industrial es un trabajo de mucha precisión previo, necesario y muy complejo para cumplir el objetivo fundamental para Avilés, que es que en 2023 el suelo de Baterías pueda estar al servicio de nueva actividad empresarial que genere empleo. Nos vamos entendiendo y vamos avanzando. En su momento haremos el planteamiento que reúna el consenso adecuado para que el Ayuntamiento lo saque adelante, porque la modificación del Plan requiere mayoría absoluta del Pleno".

El presidente de Sepides mantuvo contactos, además de con el equipo de gobierno avilesino, con los responsables del Puerto de Avilés -Santiago Rodríguez Vega, el presidente, y Ramón Muñoz-Calero, el director-, con el presidente de la Cámara de Comercio, Luis Noguera; con la cúpula española de ArcelorMittal -José Manuel Arias (presidente), Oswaldo Suárez (CEO para España) y Jesús Suárez (director de inversiones)-; el gerente de Deganta Aguas, Alejandro Romero, y el director de Química del Nalón (IQN), Javier Fernández. En cada caso, las partes se pusieron al día de sus respectivos intereses: Arcelor en cuanto a su salida definitiva de la coquería, Deganta Aguas e IQN como nuevos inquilinos, el Puerto como candidato a comprar suelo y la Cámara de Comercio como entidad dispuesta a colaborar en la captación de empresas interesadas en ubicarse en el futuro polígono industrial.

Así como urgió la modificación del PGOU de Avilés, Antonio Miguel Cervera subrayó que Sepides ya está "en clave de comercialización" de las parcelas a desarrollar en el solar de Baterías e hizo ver que conviene no perder tiempo "porque si nuestra prioridad es atraer empresas tractoras del empleo, éstas no abundan y será difícil captarlas". Es por eso que el presidente de Sepides confía en que todos los agentes económicos regionales colaboren con la sociedad estatal para que la promoción del futuro área industrial de Baterías sea un éxito. Cervera y Monteserín citaron expresamente a la Cámara de Comercio, el Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (IDEPA) y al Parque Científico y Tecnológico de Avilés como posibles "colaboradores" en la búsqueda de inquilinos empresariales.

Así lo resumió Monteserín: "Todas las instituciones aunaremos esfuerzos para, a través de nuestra acción en los diversos ámbitos, poder explicar razonablemente y razonadamente las ventajas que tiene este parque empresarial ubicado cerca del puerto, junto a centros de altísima investigación punteros en el mundo, dentro de un parque científico tecnológico y con unas posibilidades de desarrollo de una industria tecnológica en el ámbito de la Isla de la Innovación. Vamos a poner todo eso en el mismo escaparate y a difundirlo con todos los medios que tenemos para hacerlo".

Sepides, por otra parte asegura estar en disposición de sacar a licitación la elaboración del proyecto técnico que guiará los trabajos de desmantelamiento de la coquería y la obra propiamente dicha el próximo mes de julio. El importe conjunto de estos trabajos asciende a más de 15 millones de euros. Antonio Miguel Cervera recalcó que, pese a los inconvenientes derivados de la pandemia de covid-19, Sepides no ha levantado el pie del acelerador desde enero, cuando presentó las líneas maestras de su plan para las baterías de coque de Avilés, y cumple a rajatabla el cronograma anunciado.

Fruto de ese celo en los plazos, Cervera anunció la licitación "para julio" de la redacción del proyecto técnico de desmantelamiento de las baterías. Al respecto, explico que Sepides ha decidido licitar de forma conjunta el apartado técnico y la ejecución material de los trabajos "para evitar problemas que pudieran surgir si una empresa contratista diferente a la redactora del proyecto asumiera los trabajos y argumentase fallos en el apartado técnico". Esta fórmula ha sido aprobada por Abogacía del Estado atendiendo, según Cervera, "a la especial complejidad de la tarea que tenemos por delante".

De cumplirse los plazos que dio ayer el presidente de Sepides, tras la publicación de la licitación del proyecto y el desmantelamiento se daría un tiempo "generoso" (tres o cuatro meses) a las empresas interesadas para que examinen con calma las condiciones y puedan preparar sus ofertas con todo detalle. Esto supondría que para finales de 2020 se dispondría de candidatos a ejecutar la obra y "la firma del contrato podría hacerse en enero, de modo que los trabajos in situ comiencen a febrero de 2021". El plazo total que estipula Sepides para desmantelar las viejas instalaciones de la coquería es de 16 meses.

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