El Parque Tecnológico de Avilés cumple un lustro como una comunidad viva, un verdadero ecosistema de conocimiento y desarrollo científico y tecnológico que agrupa a 50 empresas, fundaciones de investigación y centros de innovación, con 854 trabajadores de los que casi 400 se enmarcan en el ámbito de la I+D+i. En sus primeros cinco años de vida ha logrado, apoyándose en la capacidad de los centros de investigación que allí se asientan duplicar el empleo en actividades de I+D+i. El concejal de Desarrollo Económico, Manuel Campa así lo refrenda: "Nuestro objetivo al aumentar la capacidad investigadora es ser capaces de atraer nuevas inversiones a la ciudad". La investigación a atrae talento y el talento genera nuevos ingresos en la llamada economía del conocimiento.

Y en esa dinámica es en la que trabajando los responsables de Sepides, la entidad encargada del desarrollo empresarial de los antiguos terrenos de Baterías, cuyo presidente, Antonio Cervera, en una entrevista en exclusiva con LA NUEVA ESPAÑA publicada este domingo, aludía a la oportunidad de este nuevo ámbito "altamente atractivo y sostenible, de características inmejorables" para el desarrollo empresarial. Esos terrenos, que servirán para ampliar el Parque Científico y Tecnológico de Avilés Isla de la Innovación, forman parte también de las prioridades del equipo de gobierno "para atraer nuevos negocios, nuevos empleos y nueva actividad a la ciudad", reflexiona Manuel Campa. Pero, ¿hacia dónde se dirige el futuro de ese nuevo corazón empresarial avilesino? "Se trataría de captar empresas ligadas al sector industrial, transformadoras, capaces de incorporar valor añadido a sus productos y que usen la enorme capacidad de los centros de investigación que tenemos". Se refiere el concejal de Desarrollo Económico a las posibilidades que ofrece para que Avilés pueda abrirse al mundo, la presencia en su Parque Tecnológico de centros como el centro global de ArcelorMittal y el Centro Tecnológico del Acero junto a multinacionales como DXC, Software AG, Satec o Idesa. Ello ofrece un gran potencial tractor para empresas especializadas y otros centros de I+D, además de brindar un enfoque dinamizador para el desarrollo de la investigación aplicada y nuevas tecnologías de la información.

Cifras cantan. En su primer lustro el área empresarial avilesina generó 509 empleos más que los que existían cuando arrancó el proyecto Isla de la Innovación, en 2015, lo que supone un 60% más. Asimismo, suma una decena más de empresas, pasando de 40 a 50 en la actualidad: un 'estirón' del 20%. El número de trabajadores en el momento presente roza los 900 frente a los 343 de los inicios. "La importancia del Parque Tecnológico para la ciudad viene por dos vías: lo que ha sido hasta ahora y lo que va a ser", sostiene el edil de Desarrollo Económico. De lo que ha sido hasta ahora el Parque Científico y Tecnológico de Avilés dan buena cuenta las cifras de estos primeros cinco años de vida pero también el hecho de haber comenzado "con unas infraestructuras, unas empresas y unos centros de investigación que generaron marca de ciudad para vendernos hacia afuera". De lo que queda por delante, abunda Manuel Campa, sólo cabe fiar buena parte del próximo desarrollo empresarial de la ciudad al proyecto que Sepides tiene en marcha en los antiguos terrenos de Baterías.

"Necesitamos sea punto de atracción de empresas con capacidad de internacionalización y de desarrollo de nuevos productos en el ámbito de materiales que es lo que mejor sabemos hacer en esta ciudad", sostiene Campa en su reflexión sobre el futuro del Parque Tecnológico. En estos cinco años ha habido logros: "Ya tenemos un nombre fuera de Asturias y es un parque reconocido por su nivel de actividad, pero estamos trabajando también en el futuro y, aprovechando que hemos creado esa marca, esa tiene que ser la unidad de comercialización de los nuevos terrenos que vamos a tener disponibles en la zona en poco tiempo".

En cuanto a las cifras, hoy ocupan el principal polo de la innovación avilesina tres empresas con capital extranjero y hay 85 negocios en incubación, frente a los 62 de los inicios. Por sexos, son 563 varones los empleados en este ámbito frente a 289 mujeres. Cuando arrancaron en 2015 eran 117 mujeres frente a 226 hombres.

Los sectores más representativos del parque son las empresas que trabajan en el área de materiales (especialmente acero) y las del sector TIC.