Somos reclama al alcalde, Iván Fernández, explicaciones sobre la paralización de las obras de rehabilitación del Palacio de Trasona, en el concejo de Corvera. "He preguntado al Alcalde en varias ocasiones por la paralización de los trabajos y no me han respondido. No sabemos si el gobierno local va a intervenir en el asunto", señaló el portavoz municipal de Somos, Rogelio Crespo.
La familia Peñalver, es la propietaria del edificio que data del siglo XVIII y que preside el entorno del pantano de Trasona. Las obras de rehabilitación del inmueble comenzaron en el verano de 2019, con la colocación del andamiaje, después de requerimiento que los propietarios habían recibido un año por parte de Patrimonio.
El proyecto preveía la rehabilitación de las dos torres y las cubiertas con labores de carpintería y cristalería, así como el corredor interior. La inversión ronda el millón de euros y ha sido sufragada íntegramente por la familia. El plazo de ejecución de las obras era de 14 meses.
"El Alcalde es conocedor de la paralización de las obras. Desde Somos Corvera hemos preguntado por la continuidad de los trabajos y en caso contrario si el Ayuntamiento piensa hacer algo, pero el gobierno local no contesta a nuestras peticiones", afirmó Crespo.
Andamiado y listo para empezar las obras, el inmueble ha estado expuestos a una infinidad de vaivenes administrativos en torno a los permisos para activar los trabajos junto a los trámites necesarios para ello pues el palacio de Trasona está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por el Consejo de Patrimonio.
La segunda parte de la intervención es la más complicado pues afecta a una parte de la cubierta del inmueble. Para llegar a ella será necesario antes reactivar los trabajos vinculados a la fachada principal y que tienen como objetivo principal evitar nuevos daños o desprendimientos del edificio, habida cuenta de esto que presentaba en algunas zonas antes de la intervención.
La demora de los trabajos ha llevado a que en algunas zonas que se encontraban en un estado de conservación aceptable acabara por entrar agua de la lluvia, lo que ha dañado la estructura de madera de los pisos, que estaban bien antes de que los trabajos de rehabilitación dieran comienzo. La primera intervención tenía un tiempo estimado de ejecución de seis meses y el resto, ocho.
