El Consejo de la Sindicatura de Cuentas aprobó el 30 de junio el informe definitivo de fiscalización de los reconocimientos extrajudiciales de crédito en los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes durante el ejercicio 2018. Y en ese documento los ayuntamientos de Oviedo, Gijón, Avilés, Siero y Castrillón confirmaron haber aprobado facturas por valor de 1.820.318 euros de los que 863.067 euros corresponden a Castrillón, seguido de Oviedo con 604.728, Siero con 209.896, Gijón con 89.695 y Avilés con 52.933 euros. El informe se realizó en coordinación con el Tribunal de Cuentas con el objetivo de determinar el importe y la naturaleza de los gastos imputados a presupuesto a través de expedientes de reconocimiento extrajudicial de crédito (EREC) y analizar los procedimientos llevados a cabo para su aprobación.
En el caso del Ayuntamiento de Castrillón, aprobó en el ejercicio 2018 diez de esos expedientes. La naturaleza del gasto de la totalidad de facturas, según la Sindicatura de Cuentas, se corresponde con suministros de energía eléctrica en diversos servicios municipales. El 66,36 % del gasto se devengó en el ejercicio 2018 y el 19,25 % en el ejercicio anterior. El resto (14,39 %) comprende periodos entre noviembre y diciembre del 2017 y enero y febrero de 2018.
"La causa que motivó la tramitación de los expedientes de acuerdo con la información facilitada por el Ayuntamiento, se produjo por la existencia de facturas sobre las que no constaba tramitación procedimental ordinaria de la contratación del gasto", explican desde la Sindicatura. Es decir, se trataba de actos dictados prescindiendo total y absolutamente del procedimiento legalmente establecido. "Nos encontramos con obligaciones indebidamente adquiridas por derivarse de uno de los supuestos susceptibles de provocar la nulidad del acto a resultas de la revisión de oficio", señala el informe.
Así las cosas, y al objeto de determinar las posibles deficiencias en la gestión que originaron la tramitación de los EREC, en base a la información comunicada por el ayuntamiento, se evidencia, según la Sindicatura de Cuentas, que existió una deficiente planificación en materia de contratación, ya que a fecha de vencimiento del contrato de suministro de energía eléctrica (28 de noviembre de 2016) no se había iniciado un nuevo procedimiento de licitación. No obstante, una vez iniciado dicho procedimiento (7 de marzo de 2017) la licitación quedó desierta", apunta el órgano fiscalizador.
